Las denuncias por bullying o acoso escolar se han disparado en Canarias en el último año según datos de la Fiscalía. Casos que ocurren especialmente entre jóvenes por el uso de las redes sociales y nuevas tecnologías. En los centros escolares se disparan también las alarmas para intentar evitar cualquier posible caso dentro de las aulas. En algunos colegios han colocado incluso cámaras de vigilancia.
La grave agresión sufrida por una niña de 8 años en un colegio de Palma de Mallorca por parte de unos compañeros ha hecho saltar todas las alarmas de Bullying entre los padres que consideran que no es suficiente con la vigilancia por parte de profesores y justifican el uso de cámaras de seguridad.
En este centro hay cámaras desde hace más de 12 años, el objetivo en su momento era vigilar las entradas y salidas, hoy controlan también los recreos.
Y aunque aseguran que siempre hay profesores, reconocen que suponen una ayuda.
Pero para muchos padres las cámaras no son suficientes para destapar una situación de acoso.
Para los educadores el problema del acoso va mucho más allá de una agresión puntual y la solución no está en descubrirla.
Y las nuevas tecnologías y las redes sociales ayudan a ocultarlo tal y como desvelan los datos de la Fiscalía del año pasado.
