Un estudio compara las sensaciones que viven las personas desahuciadas con una montaña rusa

Una prestigiosa escuela de negocios ha presentado un estudio basado en las historias de 8 personas que han perdido su hogar tras un desahucio. La conclusión más llamativa es que los afectados por un desalojo atraviesan una situación de estrés postraumático parecido a la que vive alguien que ha sufrido un accidente de tráfico o, incluso, un ataque terrorista.

El estudio analiza las distintas sensaciones y emociones que han vivido estas personas desde que compraron su casa hasta que la perdieron por no pagar la hipoteca, algo que se podría calificar como una montaña rusa. "Nunca sabes lo que va a ocurrir, cuando te va a llegar una carta de desalojo o una llamada telefónica del banco". Este sería el principal pensamiento que tienen las víctimas de los desahucios.

El autor del análisis, Juan Ramis-Pujol, ha asegurado que los desahucios afectan a la vida de la persona de manera brutal. Provocan un doble colapso ya que su mundo se derrumba y los puntos de anclaje se cae. Hay que comprender, aseguran, que las víctimas no se encuentran bien y no son conscientes de lo que ocurre a su alrededor. "La ayuda profunda y especializada es esencial", apuntan.

Ramis culpa al Estado y a las entidades de no prestar la ayuda suficiente a estas personas. Según él, hay un doble error en el sistema. El mercado falla y el gobierno no lo resuelve. Tan solo algunas organizaciones como Cruz roja, Cáritas o la plataforma de afectados por la hipoteca se han mostrado solidarios ante las víctimas, aunque según ha constatado, la mayoría piden ayuda "demasiado tarde".