El salto a la fama de los 'anónimos famosos' gracias a las redes sociales

Hay personas que están en el momento más oportuno para que las cámaras se fijen en ellos y se convierten en el blanco de los más buscados en Internet. Eso le ocurrió a Frances Satorra. En pocas horas, la etiqueta en Twitter #eldelbigote, saltó a la fama y su rostro impertérrito también. A partir de ahí, este veterano empleado de FC Barcelona, discreto dicen, es un famoso más del papel couché on line, incluso ya se venden camisetas con su cara.

‘El del bigote’ eclipsó la fama de otro anónimo. ‘El de la camisa de cuadros’. Un misterioso personaje que aparecía en la primera foto de Piqué con Shakira. En la red todos hablaban de él, incluso más, que del jugador y la cantante.

Hay más ejemplos, como un chico que ha conseguido más de 10 mil fans en Facebook y todo gracias a su simpática cara en un partido de fútbol.  Tampoco se libraron unos seguidores del Real Madrid que fueron pillados mientras aplaudían al eterno rival. Un gol de Ronaldinho les levantó de las gradas del Bernabéu. Estos personajes no buscan la fama, la encuentran sin quererlo. Es el caso de Ana. Se hizo famosa por llevar 20 años entrando la primera en las rebajas de unos grandes almacenes. Ahora es la protagonista de un spot.

Una frase también puede convertirse en un elemento crucial para saltar a la fama. Una joven utilizó la expresión ‘la he liado parda’ y posteriormente su frase fue una de las más utilizadas en Internet.