Empieza el juicio por la muerte de dos jóvenes tras ingerir estramonio

Intoxicados, alucinados y vagando sin rumbo a unos 40 grados es como se encontraban Pablo y Alberto horas antes de morir. Pero, cómo llegaron a ese estado?. En el abandonado monasterio de Perales del Río se celebraba una fiesta ilegal el día 20 de agosto de 2011. Allí Pablo, Alberto, Íñigo y Álvaro, de entre 18 y 20 años, coincidieron con Iván, un chico de 23 conocido en su barriada de Coslada como "el Cabe", un joven problemático con antecedentes por violencia doméstica y por su trapicheos con las drogas. Este les ofreció de manera gratuita un peligroso brebaje a base de estramonio que describió como una bebida casera con la que se iban a divertir. Los cuatro chicos decidieron probar.

Pasadas las horas, Álvaro empezó a notar los efectos del estramonio en su cuerpo. Iñigo da la voz de alarma y trasladan a su amigo al hospital universitario de Getafe. Con Alvaro en el Hospital los médicos advirtieron a sus amigos de que tenían que volver a la Rave y averiguar qué tipo de sustancia habían consumido y así poder luchar contra la intoxicación. "El Cabe" confiesa que lo que han bebido es estramonio.

Hacia las 10 de la mañana, Pablo y Alberto empiezan a sufrir la intoxicación del estramonio quedándose rezagados en una parada de autobús. Sobre las tres de la tarde, una pareja se cruza con Pablo, al ver sus estado intentan ayudarle. Las madres de estos jóvenes, preocupadas por la ausencia de sus hijos, acuden al Monasterio para buscarlos. Es ahí donde un policía les informa de que han encontrado el cuerpo de un chico con un tatuaje de tela de araña en el codo. Ya no hay duda, es el cuerpo de Pablo. Horas más tarde, a 4 kilómetros, encuentran el cadáver de Alberto, semidesnudo y con signos evidentes de deshidratación.

La policía, siguiendo el rastro de un apodo, da en Coslada con Iván "el cabe". Él y su novia son detenidos. Iván es trasladado a prisión y tres días más tarde es puesto en libertad provisional tras pagar una fianza de 2000 euros.