PREPARA EL MENÚ
Compra y congela: alimentos que ya puedes adquirir para la comida de Navidad
Los congelados se han convertido en el mejor aliado para adelantar la compra navideña: mariscos, carnes, canapés o postres que pueden guardarse semanas sin perder calidad y que permiten organizar los menús con más calma y menos estrés.

Publicidad
La cuenta atrás para la Navidad ya ha empezado. Con los supermercados llenos de productos especiales y los precios de algunos alimentos subiendo a medida que se acerca diciembre, cada vez más familias optan por anticiparse y llenar el congelador con todo lo necesario para los menús navideños. Es una forma inteligente de comprar más barato, planificar sin prisas y asegurarse de que nada falte en las comidas más esperadas del año.
Además, los congelados han dejado de ser una opción de segunda categoría. La industria alimentaria ha mejorado muchísimo sus procesos y hoy es posible encontrar mariscos, carnes o postres ultracongelados cuya calidad compite con la del producto fresco. Con un buen manejo y una correcta descongelación, el resultado no solo es bueno: es excelente.

Marisco: la compra estrella para adelantarse
El marisco es uno de los productos que más sube de precio en diciembre, por lo que comprarlo ahora y congelarlo es casi una inversión. Gambas, langostinos, cigalas, vieiras o zamburiñas resisten perfectamente la ultracongelación.
Una vez en casa, basta con guardarlos en bolsas de cierre hermético y congelarlos lo antes posible para conservar todo su sabor. Cuando llegue el momento de cocinarlos, lo ideal es descongelarlos lentamente en la nevera para que mantengan su textura perfecta.

Carnes y aves que se conservan sin problema
Otra gran opción para adelantar compras son las carnes destinadas a los menús navideños. El solomillo de ternera, el cordero o el pavo se congelan sin perder jugosidad si se envasan correctamente.
La clave está en guardarlos bien protegidos —preferiblemente al vacío— para evitar la quemadura por frío. De esta forma, no solo se conserva la calidad, sino que se facilita enormemente la organización de las comidas familiares: basta con descongelar 24 horas antes y cocinar al gusto.

Canapés y entrantes listos para hornear
Cada vez más supermercados ofrecen bandejas de canapés y hojaldres salados preparados para meter directamente al horno. Volovanes rellenos, tartaletas, croquetas gourmet, mini quiches o empanaditas pueden permanecer congelados semanas sin perder textura.
Son ideales para las cenas improvisadas o para aliviar el trabajo en Nochebuena y Nochevieja: solo hay que precalentar el horno y hornear los minutos indicados. No hay planificación más cómoda.

Verduras y acompañamientos
Las verduras congeladas también son grandes aliadas durante las fiestas. Guisantes, judías verdes, espárragos o alcachofas mantienen su valor nutricional y permiten preparar guarniciones en unos minutos.
Además, muchos supermercados venden mezclas navideñas ya listas para cocinar: verduras asadas, patatas especiadas o menestras completas que resuelven un menú sin esfuerzo.

Postres que te sacan del apuro
No todo van a ser mazapanes y turrones. Hoy en día es fácil encontrar troncos de Navidad, milhojas, tartas de queso, coulants o coulis de fruta que solo necesitan un golpe de microondas o unos minutos de descongelación.
Para quienes no tienen tiempo (o ganas) de hornear, estos postres congelados son una bendición: se mantienen perfectos durante semanas y están listos para servir cuando llegan las visitas.

La ventaja de planificar con tiempo
Comprar congelados para Navidad no solo ahorra dinero: también reduce estrés, evita carreras de última hora y permite dedicar más tiempo a lo importante, que es disfrutar alrededor de la mesa.
Tener el congelador bien organizado es, en definitiva, el mejor truco para unas fiestas más tranquilas, más cómodas… y con la misma ilusión de siempre.
Publicidad





