Un escáner facial, lo último para facilitar el pago a los clientes

Tiene nombre y apellido: 'Smile to pay'. Es decir, sonreir para pagar. Se trata de una aplicación que identifica al usuario por su rostro y que puede cambiar la forma de comprar. Consiste en un reconocimiento sencillo, donde el usuario muestra su rostro, como si de un 'selfie' se tratase.

La fórmula es la misma que la del ya conocido pago por huella digital y, según algunos compradores preguntados, va a incentivar el consumo. "A los consumidores nos gusta que nos pongan las cosas fáciles", dice una mujer.

Y es que en los últimos años está aumentando no sólo el uso de dinero de plástico en forma de tarjeta, sino también en pulsera o incluso desde el móvil. Un sensor integrado en el datáfono permite leer el chip que poseen y, con tanto solo acercarlo, el pago está hecho.