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DÍA MUNDIAL DE LA PSORIASIS

En España alrededor de un 2,3% de la población sufre psoriasis

La psoriasis es una enfermedad crónica, autoinmune que aparece sobre la piel en forma de placas rojizas elevadas, recubiertas por una capa blanca de células muertas de la piel que suelen ser dolorosas o causan picor. El tratamiento se aborda con cremas corticoides o medicamentos biológicos que pueden suponer un coste de entre 12.000 y 15.000 euros al año.

"Pasé 17 años escondido y un día, de la noche a la mañana, decidí presentar en sociedad mi psoriasis y me paseé por todo el pueblo", así habla de su enfermedad Sebastián Santana, uno de los españoles que sufre el estigma de esta patología que se caracteriza por la aparición de placas blancas en la piel.

La psoriasis es una enfermedad crónica, autoinmune -la provoca la propia persona- y no contagiosa que puede aparecer sobre la piel de todo el cuerpo en forma de placas rojizas elevadas, recubiertas por una capa blanca plateada de células muertas de la piel que a menudo son dolorosas o causan picor.

También causan el rechazo de muchas personas y tiene una gran afectación psicológica para el enfermo que, como en el caso de Santana, vive escondido por el temor a las miradas de la gente.

Para dar a conocer esta patología y contribuir, así, a la integración de los enfermos en la sociedad, la asociación Psoriasis en Red organiza el I Congreso Español de Pacientes de Psoriasis y Artritis Psoriásica con motivo del Día Mundial de esta enfermedad.

En España, se calcula que el 2,3% de la población sufre esta dolencia -más de un millón de personas- aunque según la presidenta de Psoriasis en Red, Celia Marín, es posible que exista un infradiagnóstico porque las personas con síntomas más leves muchas veces no se tratan. La padecen por igual hombres y mujeres y, aunque puede aparecer a cualquier edad, existen dos picos en los que se manifiestan la mayoría de los casos: entre los 20 y 35 años y a los 60 años.

La doctora María Concepción Oñate, médico de Atención Primaria, ha explicado, además, que en la enfermedad se puede desencadenar después de una infección estreptocócica o tras sufrir un hecho estresante, como la muerte de un ser querido. A lo largo del tiempo, aparecen brotes que afectan a todo el cuerpo y que se desencadenan por el estrés, un cambio de medicación, etc.

El tratamiento varía en función del grado de afectación. En etapas tempranas de la enfermedad se aborda con cremas hidratantes, emolientes y corticoides tópicos, y en las más avanzadas se usan medicamentos biológicos.

Estos últimos, de uso hospitalario, son bastante caros -entre 12.000 y 15.000 euros al año- y los pacientes denuncian que no siempre los médicos de Atención Temprana les derivan a los especialistas para su administración. Además, entre un 30 y un 40% de las personas con psoriasis puede desarrollar también artritis psoriásica en las articulaciones.

Oñate ha insistido en que los hábitos de vida saludables contribuyen a controlar mejor la enfermedad y evitar los brotes, y ha recomendado seguir una dieta mediterránea, abandonar el tabaco y el alcohol y controlar la diabetes y el colesterol.

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