Mariano Rajoy, durante la recepción de los Reyes en el Palacio Real

Publicidad

CONSIDERA QUE SERÍA UNA VUELTA A LA LEGALIDAD

El Gobierno paralizaría el artículo 155 si Puigdemont asegura de forma clara que no declaró la independencia de Cataluña

De Cataluña se ha hablado, y mucho, durante la tradicional recepción en el Palacio Real ofrecida por los Reyes. Fuentes del Gobierno consideran que Carles Puigdemont tiene "una gran oportunidad" para "dejar de jugar con todo el mundo", ahora que "la pelota está en su tejado".

El Gobierno considera que si el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, responde a su requerimiento afirmando que no ha declarado la independencia de Cataluña eso supondría que el Gobierno no aplicaría las medidas del artículo 155 y se volvería al escenario anterior al pleno del Parlament de los días 6 y 7 de septiembre, en los que se aprobaron las leyes de referéndum y de transitoriedad -suspendidas por el Tribunal Constitucional--. Así lo han señalado fuentes del Ejecutivo durante la tradicional recepción en el Palacio Real ofrecida por los Reyes con motivo de la Fiesta Nacional.

Eso sí, las mismas fuentes han subrayado que la respuesta del presidente catalán tiene que ser clara. El propio requerimiento señala que si no hay respuesta se entenderá como una confirmación de que se ha declarado la independencia. Las fuentes también han admitido que hay interpretaciones diferentes sobre si lo que hizo Puigdemont el martes por la tarde en el Parlament fue o no una declaración de independencia. El 'president' dijo que asumía "el mandato" de convertir a Cataluña en un Estado independiente para luego pedir al Parlament que suspendiese los efectos de la declaración de independencia, sin que éste llegase a votar nada. Luego los diputados de Junts pel Sí y la CUP firmaron un texto que hablaba de la constitución de una república catalana, pero en una sala anexa.

En todo caso, las mismas fuentes consideran que Puigdemont tiene "una gran oportunidad" para "dejar de jugar con todo el mundo", ahora que "la pelota está en su tejado". Puigdemont tiene hasta el lunes para responder al requerimiento del Gobierno que, con ese paso, ha puesto en marcha la aplicación del artículo 155. El Gobierno le da un segundo plazo de otros tres días para que rectifique, es decir, hasta el jueves por la mañana.

Si fuese necesario aplicar el 155 el Gobierno tendría que pedir autorización al Senado y para eso podría celebrarse un Consejo de Ministros el mismo jueves. No obstante, otras fuentes gubernamentales apuntan que aunque se pongan en marcha los plazos no tiene por qué ser con inmediatez. En todo caso, por el momento el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, mantiene en su agenda el Consejo Europeo de los próximos jueves y viernes.

Las fuentes consultadas también explican que el Gobierno ha tratado de ofrecer seriedad y claridad, y no dejar que todo siga en una nebulosa, y valoran el acuerdo con la oposición porque transmite estabilidad. Además, han respondido a la insistencia de Puigdemont en buscar mediadores que no hay mejor mediación que la del Congreso Diputados.

El compás de espera hasta que Puigdemont dé su respuesta, y cierta sensación de no estar ya tan al borde del precipicio han marcado las conversaciones informales durante la tradicional recepción del 12 de octubre, aunque todos los responsables y exresponsables políticos han afirmado seguir muy preocupados por la situación. Para el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no es evidente aún que vayan a aplicarse las medidas del 155, puesto que todo dependerá de la respuesta de Puigdemont. Eso sí, él mismo dice que hasta ahora el presidente catalán parece ser el único empeñado en que se aplique, además del presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. Sánchez cree que lo mejor sería que todo desembocase en unas elecciones, pero lo ideal sería que las convocase Puigdemont.

Rivera, por su parte, se mostraba convencido de que el 'president' no dará un paso atrás, todo lo más tratará de "chantajear" y buscar algún privilegio. En su opinión, si el Gobierno termina por no aplicar el 155 enfadará a los ciudadanos.Y mientras Pedro Sánchez saludaba que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, haya asumido la necesidad de actualizar la Constitución, Rivera advertía de que el PSOE quiere la "nación de naciones" y una reforma para contentar a los nacionalistas, no a todos los españoles. Rivera sí cree que la situación sigue al borde del precipicio y que si la independencia no se ha declarado es por la presión que han ejercido las empresas dejando Cataluña.

Varios de los asistentes han mostrado su acuerdo con esta decisión de Rajoy de activar el 155 con un requerimiento a Puigdemont fijando un plazo no demasiado corto. El expresidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero cree que ha sido una respuesta "inteligente". Eso sí, también opina que sería deseable no tener que aplicar el resto del artículo y constata que el problema será largo y hay que estar preparados para ello. La expresidenta del PP de Madrid Esperanza Aguirre también ha dicho que le parecía bien la decisión de Rajoy, mientras la actual presidenta del PSOE, Cristina Narbona, opinaba que al dejar un plazo de varios días Rajoy también da pie a que afloren contradicciones en el bando independentista. Eso sí, también cree que Puigdemont tiene muy difícil dar marcha atrás, precisamente por las presiones de los independentistas.

Publicidad