La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha promulgado un decreto que aumenta el salario mínimo para los trabajadores del país a 724 reales (223 euros) a partir de enero del próximo año, lo que supone un alza cercana al 7%.
"Firmé el decreto que reajusta el salario mínimo a 724 reales a partir de enero del 2014, reajuste de 6,78 por ciento por sobre el valor actual", ha indicado Rousseff este lunes en su cuenta de Twitter.