"Esta rebaja del 'rating' refleja la ausencia de un programa de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional nuevo, creíble y totalmente financiado, junto a la elevada incertidumbre solo el papel de los acreedores privados en cualquier futura financiación, así como las débiles previsiones macroeconómicas de Grecia", explica.
Con esta decisión, la agencia finaliza el proceso de revisión para una posible rebaja de la calificación de la deuda helena iniciado el pasado 20 de mayo, en el que ya avisaba de la posibilidad de esta rebaja si no se acordaba un plan creíble para la economía helena.
La agencia, que también ha recortado la calificación de la deuda a corto plazo desde 'B' a 'C', explica que la anterior calificación de la deuda a largo plazo se basaba en la premisa de que cualquier nueva aportación económica al país no estaría condicionada a la participación del sector privado en un nuevo y mejorado programa de la UE y el FMI, lo que sería potencialmente un 'default'.
"La calificación 'CCC' de Fitch resume el sustancial riesgo crediticio y reconoce que un 'default' es una posibilidad real. Según lo señalado por Fitch, la implicación del sector privado probablemente sería considerada como una señal de impago de crédito soberano y podría llevar a un 'rating' de default'", remarca.
Fitch reconoce que es necesaria una nueva ayuda para hacer frente al déficit de financiación fiscal de Grecia que, de otro modo, surgiría en 2012. Así, reconoce que esperaba que esta nueva ayuda, junto con el papel de los acreedores privados, se resolviera en el marco de la cuarta revisión del programa de ayuda de la UE y el FMI que se realizó a principios de mes.
A este respecto, subraya que, aunque los principales parámetros del nuevo programa fueron discutidos en el Ecofin celebrado los días 11 y 12 de julio, no se aclaró ni el volumen ni los términos de la nueva ayuda o la naturaleza de la participación del sector privado.
Así, insistió en que cualquier apoyo financiero adicional para Grecia sólo será creíble si está plenamente financiado más allá del actual programa hasta mediados de 2013, ya que las necesidades de financiación podría ascender en 2014 hasta los 172.000 millones de euros, cifra muy superior a los 110.000 millones de euros que ya están acordados.
Asimismo, la agencia muestra su preocupación por la dependencia de la privatización de activos en la recuperación de la economía helena, así como una participación del sector privado aún sin definir, que dejarían el programa "vulnerable" a futuros déficits de financiación.