Vino español

De la cepa al mundo: los vinos españoles se abren paso fuera de nuestras fronteras

El vino español, cada vez de mayor calidad y mejor valorado, gana peso en las bodegas de los grandes coleccionistas internacionales y en las cartas de los mejores restaurantes del mundo. Así lo han demostrado los productores que han presentado en primicia la cosecha 2024 en un evento organizado por Vila Viniteca.

 De la cepa al mundo: los vinos españoles se abren paso fuera de nuestras fronteras.

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No importa el momento: cualquiera es bueno si el vino también lo es. Y lo es cuando los productores se esfuerzan al máximo por conseguirlo. "Tienes que prestar atención al detalle, de principio a fin", revela el enólogo danés Peter Sisseck, propietario de Dominio Pingus. Si le preguntamos a Álvaro Palacios, otro de los grandes nombres del mundo vinícola, lo tiene claro: lo que marca la diferencia es la pureza y la transparencia. "Un buen vino debe representar el lugar de donde viene, la viña en la que ha crecido", defiende el propietario de Bodegas Álvaro Palacios.

Ese es el espíritu de la presentación de la cosecha 2024, aún en fase de crianza, en un evento muy especial organizado por Vila Viniteca en el Espacio Larra. Allí los asistentes han podido degustar en exclusiva vinos quetodavía están en desarrollo, guiados y asesorados por las explicaciones de sus propios creadores. “Se presentan los vinos al consumidor antes de que estén terminados, y así restaurantes o distribuidores pueden hacer su reserva para asegurarse de que no se queden sin ellos”, explica Quim Vila, director de Vila Viniteca.

El vino español conquista al mundo

La joya vinícola de nuestro país, diversa y cada vez más valorada, sigue ganando peso fuera de nuestras fronteras. Son vinos cada vez más cuidados, elaborados con esmero y con una calidad reconocida internacionalmente. Así, se abren paso en las cartas de los mejores restaurantes del mundo y en las bodegas de los coleccionistas más exigentes. “En volumen no, pero la calidad, desde luego, ha explotado”, afirma Sisseck.

Y mientras nuestros vinos conquistan el mundo, en España tenemos una tarea pendiente: los jóvenes. Sara Pérez, enóloga y copropietaria de Mas Martinet y Venus La Universal, lo tiene claro. “Hay un periodo de entrenamiento y conocimiento para entender qué es un gran vino. Saber qué te va a hacer disfrutar y beberlo con consciencia. No es solo beber por beber”. Porque así es el vino: un placer diario, en pequeñas dosis, especialmente cuando se cría con mimo desde la cepa hasta la copa.

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