Un niño de 4 años, a punto de morir ahogado, en la piscina de unos apartamentos

En Canarias es obligatorio que en  hoteles de más de 40 unidades alojativas existan carteles informativos, salvavidas y al menos, un socorrista. No así en establecimientos más pequeños o residenciales privados.  Aunque si debe existir  alguien que  vele por la seguridad de los bañistas.

Aquí sólo Lester vigila las zonas de baño. Tiene que estar atento a las tres piscinas que existen en el establecimiento. Lo hace a través de esta tablet que en tiempo real  muestra lo que está pasando en todo el recinto.

Pero existen otras medidas de seguridad. Un mecanismo que al accionarlo para los motores de las piscinas en caso de succión, desfibriladores y este intercomunicador

Los especialistas recomiendan que aunque los niños sepan nadar siempre estén vigilados por un adulto.