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PARTICIPÓ A SUS 78 AÑOS
Con espíritu de superación
Era el más longevo de la prueba y tardó más de 5 horas en terminar la carrera, pero él la había ganado antes de empezarla.
La desgastada gorra roja que lleva es para Robin Wilson, este inglés de 78 años, una especie de amuleto. La de Gran Canaria de este 2013 ha sido su 430 maratón. Pero no es ese su único logro, el mayor reto que ha conseguido en la vida fue cambiar las 15 cervezas que tomaba diariamente por unas zapatillas de deporte.
Sabe que es un ejemplo de superación, pero dice solo lo hace porque correr le hace feliz. Hace pocos días estaba corriendo en Bélgica bajo la nieve, por eso agradece muchísimo el clima que le ofrece esta isla. Ya la tiene entre sus favoritas, junto a la de Nueva York, Berlín o Barcelona.
Pero en esta carrera Wilson no es el único del que debemos aprender. Yeray, afincado en Lanzarote, sufrió un accidente hace 3 años, pero él decidió no rendirse. Wilson quiere llegar a las 500 maratones y Yeray seguir practicando deporte, no importa en que puesto quedaron, ellos ya han ganado.
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