Con los votos del Grupo Popular, el ayuntamiento de la capital grancanaria sacó adelante un presupuesto de 296 millones de año, una cifra que dobla las inversiones en Bomberos y en Obras, y experimenta un aumento en los parques y en la limpieza. Para Cultura y en Vivienda, en cambio, hay menos dinero.
El reto es sanear las cuentas al final de la legislatura.La oposición denuncia una subida de impuestos. El alcalde presentó una moción en la que se pide al Gobierno regional más apoyo financiero.Ningún grupo votó en contra.