El corto que amenazaba la seguridad de EEUU ve por fin la luz

En 2008 Garriott, empresario de videojuegos e hijo de astronauta, pagó su viaje a la ISS para convertirse en el sexto turista espacial. Allí, sin conocimiento de la NASA,  grabó la mayor parte de su corto de ocho minutos que llevaba meses preparando.

Una vez  finalizado el trabajo llegaron los problemas. La NASA vetó la cinta y empezaron los rumores. Había quien aseguraba que el corto amenazaba la seguridad nacional de EEUU o que revelaba secretos sobre extraterrestres.

Nunca más lejos de la realidad. Estrenada para sólo unos elegidos el contenido esta lleno de risas, situaciones absurdas y efectos especiales. La historia comienza en la ISS, cuando los tripulantes se despiden sonrientes de Garriot, pero después se felicitan por haberse librado de él.  De repente, el único tripulante ruso advierte de que están consumiendo más oxígeno de lo normal.