Luis Rubiales, desenmascarado por su tío Juan Rubiales: "Él ha sufrido la persecución de su sobrino"

Juan Rubiales, tío de Luis Rubiales, ha roto su silencio después de toda la polémica que ha rodeado a su sobrino después del beso que le dio a la futbolista Jenni Hermoso en la final del Mundial sin su consentimiento.

Él era el jefe del gabinete de comunicación de Luis Rubiales, su hombre de máxima confianza y, además, su tío.

Su primer desencuentro, ha explicado Juan Rubiales en una de las tres entrevistas que ha concedido, ocurrió cuando, al segundo día de nombrarle presidente, lo llamó a su despacho para decirle que ya no le podía llamar Luis. “Me dice que le tengo que llamar presidente y días después me dijo que era un empleado”, ha asegurado.

A partir de ahí y poco a poco su relación comenzó a desquebrajarse.

El entonces jefe del gabinete de comunicación ha explicado además que Luis llegó a la RFEF y se puso su sueldo y la comisión, algo que a él no le pareció bien. “Le dije que lo de la comisión sonaba muy mal”, ha confesado.

Tampoco le gustaban cosas como el viaje a Nueva York supuestamente pagado por la RFEF o la polémica reunión del presidente en un chalé de Salobreña, de la que fue testigo.

La gota que colmó el vaso, sin embargo, fue cuando Luis le dijo a su tío que había que hacerle llegar a su padre, Luis Manuel Rubiales, hermano de Juan, un sueldo mensual de la federación. “Yo le dije que no iba a participar en eso”, ha asegurado, tras lo cual Rubiales le echó de su despacho.

“Fue la última vez que hablé con él”, ha asegurado. Juan entonces perdió su trabajo y su relación con su hermano y su cuñada, que decidieron romper con la familia.

De ahí pasaron a los tribunales, ya que, según ha explicado Juan, le advirtió de que si la cosa se ponía fea irían a por él por haber sido el jefe de gabinete en aquella época. Es entonces cuando decidió ir a la Fiscalía.

Las fiestas de Luis Rubiales

En agosto de 2020, lo que supuestamente iba a ser una reunión de trabajo en Salobreña acabó convirtiéndose en una fiesta en un chalé de lujo con vistas al mar.

“Me llaman diciendo que han montado una reunión en Granada, entonces bajo y me encuentro allí que no hay reunión ni hay nada”, ha explicado Juan Rubiales.

"Me parece algo muy grave y creo que el Gobierno debería explicarlo"

Una fiesta a la que acudieron chicas jóvenes que trajo Nené, uno de los amigos de Luis Rubiales, unas chicas que tenían alrededor de 18 años. “Le dije que podrían ser sus hijas”, ha confesado.

La propietaria ha dejado claro que el chalé, que obtuvieron por 4.500 euros la noche, lo alquiló la RFEF, y que “no dieron ruido”, algo que también han asegurado los propios vecinos.

La Fiscalía está tratando de averiguar con qué dinero se pagó, aunque todo apunta a que los fondos salieron de la Federación, ha explicado José María Olmo. Juan Rubiales fue la única persona que acudió a la Fiscalía a denunciarlo y esto ha hecho que lleve un año y medio en paro. "Si hubiera querido estaría en unas circunstancias mucho mejores", ha explicado el jefe de investigación de 'El Confidencial'.

También ha querido dejar claro que todo lo que cuenta ocurrió así porque hay pruebas que lo demuestran, incluso audios del propio Luis Rubiales, además de otros documentos que están publicados. Estas fiestas son conocidas desde hace un año por la Fiscalía y el Gobierno, pero decidió no hacer nada. "Me parece algo muy grave y creo que el Gobierno debería explicarlo", ha dejado claro.

Las comisiones de Luis Rubiales

Luis Rubiales ha estado cinco años como presidente de la RFEF, un mandato que desde el primer momento ha estado salpicado por la polémica, según ha explicado su tío Juan Rubiales.

Y es que durante todo este tiempo las presuntas irregularidades han acorralado al dirigente.

El primer escándalo fue la organización de la Supercopa en Arabia Saudí, algo por lo que Rubiales se llevaría supuestamente 40 millones por temporada.