Los looks más icónicos de Gwyneth Paltrow en la historia de los Oscar

La presencia de Gwyneth Paltrow en cualquier red carpet da siempre que hablar, pero, en la gala de los Oscar, aún más. Sus looks han pasado a la historia como icónicos y siempre ha entrado a la lista de las mejores vestidas de la noche. Por eso, hoy os traemos un repaso de sus mejores looks a lo largo de los años en la noche más importante del cine.

Año 1996, con Brad Pitt

En 1996, Paltrow acudió a la gala con su novio de entonces, Brad Pitt. Aunque ninguno de los dos estaban nominados, fueron el foco principal de la noche, ya que eran la pareja del momento.

Llevó un vestido simple slim de color blanco con pedrería de la marca Calvin Klein, que marcó un antes y después en la moda de los años 90. De complemento, tenía en conjunto una pashmina.

Año 1999, con su estatuilla

Y el vestido más icónico de Gwyneth Paltrow en los Oscar es ni más ni menos que el famosísimo vestido rosa de Ralph Lauren. Es con el que ganó el premio a Mejor Actriz por su papel en Shakespeare in love.

Explicó que, unos días antes de la ceremonia, acudió con su madre y unas amigas a una boutique de Ralph Lauren en Los Ángeles, donde eligió el vestido tipo princesa rosa con escote en V y tirantes. Pidió que se modificara el corsé por una silueta menos ajustada.

Complementó su look con pendientes, un brazalete y un collar de diamantes Harry Winston, con un valor total de 160 mil dólares. Nunca pensó que, casi tres décadas después, seguiría siendo un look tan icónico.

Año 2000, con el vestido que subastó años más tarde

Acudió a la ceremonia de los Oscar en el 2000 con un vestido midi lencero y plateado de Calvin Klein, que combinó con un brazalete, sandalias y bolso plateados y un colgante tipo japa mala rojo.

El mismo vestido decidió subastarlo en el 2020 para recaudar fondos para la crisis del coronavirus y tuvo un poco de polémica. Aunque el gesto fue muy solidario, los fans encontraron un artículo del 2013 en su blog donde hablaba de sus peores estilismos a lo largo de los años y uno de ellos fue este. Lo borró inmediatamente.

Año 2002, con transparencias

Ya hemos hablado de este vestido en otras ocasiones, pero debemos dejar constancia de él en esta lista. Se trata del look de Alexander McQueen que llevó en la gala del 2002, con un corpiño transparente y una larga falda de tafetán.

Fue muy polémico a causa de sus transparencias en la parte del pecho, que la misma actriz confesó equivocarse al no ponerse sujetador. Con o sin transparencias, este vestido ha pasado a la historia como uno de sus looks más recordados.

Año 2007, con un color destacable

Como has podido comprobar, Gwyneth apuesta por la sencillez y las líneas limpias de todos sus looks van acompañados por tonos discretos, sintiendo especial predilección por el blanco. Pero la gala de 2007 fue la excepción.

Un vestido firmado por Zac Posen, en un precioso naranja atrevido y con un cuerpo drapeado, que envolvía la figura de Gwyneth a la perfección. Fue coronada como una de las mejores vestidas de la noche.

Año 2011, con un aire futurista

La actriz, de entonces 38 años, dio mucho que hablar con un vestido metalizado reluciente del diseñador Calvin Klein –otra vez más–. Un diseño de líneas minimalistas, con un peinado ultra liso, haciendo un look muy pulido y futurista.

Fue una apuesta, por entonces, muy atrevida, que la convirtió una vez más en una de las favoritas de la alfombra roja de ese año.

Año 2012, con su vestido con capa mítico

En la 84ª edición de los Oscar, Gwyneth Paltrow fue galardonada como la mejor vestida de la noche. Un vestido minimalista con capa, de color blanco, escote asimétrico y caída espectacular, firmado por Tom Ford.

La actriz lo acompañó con un llamativo brazalete en color blanco de piedras cristal y un sencillo recogido de pelo que dejaba ver la capa del vestido.

Año 2015, con su retorno al rosa

En 2016 eligió esta fabulosa creación asimétrica de Ralph & Russo Couture. Un vestido rosa empolvado, que fue un look de solo aciertos. Desde el vestido en sí, con una enorme rosa en el hombro, al maquillaje nude sencillo, con un peinado elegante con la raya hacia un lado y unos pendientes impresionantes. Una vestimenta que rinde muy buen homenaje a su mítico look del 99.

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