Ruta por toda España: placer en vena
Los mejores chiringuitos 'deluxe' de España para comer MUY bien
Valencia, Marbella, Barcelona... seleccionamos cinco chiringuitos en los que se come maravillosamente.
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Atrás quedaron los tiempos en los que los chiringuitos eran sinónimo de paellas radioactivas, sablazos en la cuenta y camareros con palillo en la boca y jurando en arameo mientras te retiran el plato sin que te hayas comido el último calamar... Esta imagen, que ciertamente no anima mucho a escaparse a comer a la orilla del mar, es parte del pasado. Hoy hay chiringuitos 'deluxe' bonitos, en los que se come increíblemente bien y que hacen del verano un mundo mejor, mucho mejor. Recorremos cinco en los que disfrutar como enanos.
Marina Beach (Carrer Marina Real Juan Carlos I, s/n, Valencia). Localizado en primera línea de las playas de Las Arenas, Marina Beach puede engañar a primer vista. Nos encontramos con un espectacular complejo de ocio con sesiones de djs, piscina, zona lounge... en el que, además, se come muy bien. Los arroces son de primera y cuentan con el sello de Juan Carlos Galbis, primer cocinero en recibir una estrella Michelin en la ciudad de Valencia. Aquí se toma la versión auténtica de la paella valenciana, pero hay más, mucho más. El chef ejecutivo Sebastién Gros revisa recetas tradicionales dándole un plus a cada receta. Es bueno el 'esgarraet' con all-i-oli de membrillo, y también los huevos rotos con cigalitas, langostinos y puerros. Para comer buena cocina valenciana en un entorno único.
La Milla Marbella (Urbanización Los Verdiales, Marbella). Con una situación privilegiada entre los grandes hoteles de la zona, el Hotel Marbella Club y el Hotel Puente Romano, La Milla Marbella ofrece una experiencia gastronómica andaluza, pero adaptada a los nuevos tiempos. Mariscos y pescados que se adaptan a la temporalidad y a la disponibilidad del producto, siempre optando por la mejor materia prima de las zona. Con esto, Luis Miguel Menor, chef ejecutivo, trabaja con dos cartas, una popular y otra más gourmet. En el primer caso, destacan los espetos y los arroces. En la parte de alta gastronomía hay maravillas como el tartar de gamba roja o el huevo fruto con caviar y gamba blanca a baja temperatura. La bodega y la coctelería también están a la altura.
Mi Candelita (Playa de Bañugues, Asturias). En la playa asturiana de Bañugues acaba de abrir Mi Candelita, el nuevo proyecto del chef Fran Heras, al frente de Llamber, en Barcelona. En este proyecto hay mucho amor. Por ejemplo, por su hija Candela, que es la que da nombre al restaurante. Una apuesta por los buenos arroces mediterráneos, entre los que hay uno vegano y otro 'del senyoret', pero sin dejar de lado los pescados y mariscos del Cantábrico. Como no solo de comer vive el cliente, en Mi Candelita también apuestan por una programación musical que redondea la experiencia.
Pez Vela (Passeig del Mare Nostrum 19-21, Barcelona). El exitoso grupo Tragaluz, con restaurantes de éxito en Madrid (Bar Tomate) y Barcelona (Hotel Omm), también posee un chiringuito en La Barceloneta. En una terraza con espectaculares vistas al mar, Pez Vela propone una carta centrada en entrantes frescos de la huerta, el mar y arroces como el de setas, butifarra o espárragos o el a banda con espadeñas. Ojo, porque también merece la pena probar el pescado salvaje del día o la chuleta de buey elaborada en la parrilla de carbón natural.
Nácar (Paseo de la Barquera, s/n, San Vicente de la Barquera). La cocina del chef Óscar Calleja -dos estrellas michelin por Annua- se vuelve más accesible en este restaurante ubicado al lado de su hermano mayor, en un emplazamiento de ensueño, con unas vistas maravillosas del Cantábrico. Las ostras son la estrella en la carta del restaurante, pescadas en la zona y de gran calidad, pero las rabas de calamar fresco o la vaca de Cantabria troceada la brasa son opciones igualmente recomendables para completar una comida de primera.
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