¿Es verdad que la colonia envejece la piel?

En la búsqueda constante de lucir bien y sentirnos atractivos, a menudo recurrimos a productos cosméticos y de cuidado personal que, aunque nos proporcionen un aroma agradable, podrían tener consecuencias negativas a largo plazo para nuestra piel. Uno de estos productos aparentemente inocentes es la colonia o perfume que utilizamos a diario. ¿Sabías que su uso continuado puede contribuir al envejecimiento prematuro de la piel? Sí, has leído bien. La aplicación regular de colonia puede tener efectos adversos en la salud de nuestra piel, y aquí te explicaremos por qué.

El alcohol en las colonias: un doble filo para la piel

Uno de los ingredientes más comunes en la mayoría de las colonias y perfumes comerciales es el alcohol. Si bien este componente ayuda a que el aroma de la fragancia se evapore rápidamente y se adhiera a la piel, también puede tener efectos desfavorables para nuestra dermis.

Mireia Fernández, directora técnica de Omorovicza, señala que el alcohol, al ser aplicado sobre nuestra piel, reduce los niveles de hidratación, eliminando la humedad y afectando su función barrera, lo que puede provocar resequedad y enrojecimiento. Esto contribuye a la pérdida de colágeno y elastina, dos componentes que son fundamentales para mantener la piel firme, elástica y joven. Por lo tanto, el uso regular de colonias ricas en alcohol puede acelerar el proceso de envejecimiento cutáneo, dejando la piel más propensa a la aparición de arrugas, manchas y flacidez.

¿Cómo afecta la colonia a la piel?

Cuando aplicamos colonia directamente sobre la piel, especialmente en áreas como el cuello, el escote y los brazos, estamos exponiendo esas zonas a los efectos nocivos del alcohol. La piel, al entrar en contacto con el alcohol de la colonia, se deshidrata y pierde su capacidad para retener la humedad, lo que puede llevar a un deterioro prematuro de su apariencia y textura. El uso continuado "puede provocar que el escote y el cuello se vean, con el paso del tiempo, fotoenvejecidos, con más manchas, pérdida de firmeza y con la sensación de tener una piel madura, más fina y debilitada", analiza Sonia Ferreiro, cosmetóloga y biotecnóloga en Byoode.

Además, la exposición prolongada al alcohol presente en las colonias puede hacer que la piel se vuelva más sensible y propensa a la irritación, especialmente en personas con pieles sensibles o con condiciones como dermatitis o eczema. Esto puede resultar en enrojecimiento, picazón y descamación, haciendo que la piel luzca aún más envejecida y poco saludable.

Alternativas más amigables: los aceites esenciales

Ante los potenciales riesgos que conlleva el uso de colonias tradicionales, cada vez más personas están recurriendo a alternativas más naturales y amigables con la piel, como son los aceites esenciales. A diferencia de las colonias, los aceites no contienen alcohol y están compuestos por extractos vegetales concentrados, que ofrecen beneficios tanto para el aroma como para la salud de la piel, hidratándola y ayudándola a mantener su elasticidad y firmeza.

Bella Hurtado, directora técnica de la firma de aromaterapia Aromatherapy Associates, asegura que "precisamente por ser un componente lipídico, serán mucho más afines con la barrera de la piel". Sobre cuáles son las mejores opciones, nos aconseja usar poca cantidad si es un aceite concentrado en los mismos puntos de contacto en los que aplicaríamos la colonia. También se pueden usar alternativas como los roll-on, que permite aplicarse fácilmente.

Además, los aceites esenciales tienen propiedades terapéuticas, que pueden ayudar a aliviar el estrés, mejorar el estado de ánimo y promover la relajación.

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