El Congreso de EE UU pide limitar el intercambio de inteligencia con España por sus contratos con Huawei

El intercambio de inteligencia entre Estados Unidos y España se encuentra en entredicho tras una petición formal de los líderes de los comités de inteligencia del Congreso estadounidense. El senador Tom Cotton y el representante Rick Crawford han solicitado a la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, que se limite la información compartida con España, citando riesgos derivados de la decisión del Ministerio del Interior español de contratar a Huawei para el almacenamiento y gestión de escuchas judiciales.

El origen de la polémica: contratos con Huawei

El Ministerio del Interior de España adjudicó a Huawei un contrato de 12,3 millones de euros para almacenar y gestionar escuchas telefónicas judiciales a través de sus servidores OceanStor 6800 V5, parte fundamental del sistema SITEL de interceptación legal.

Pese a la exclusión de Huawei del despliegue de redes 5G en España siguiendo recomendaciones europeas, la compañía china sigue operando en funciones críticas de soporte tecnológico para la policía y la inteligencia nacionales.

Las preocupaciones de Washington

Los congresistas estadounidenses argumentan que la "dependencia" de España de Huawei para tareas sensibles expone la infraestructura nacional y la de sus aliados al riesgo de espionaje por parte del gobierno chino, dada la vinculación de Huawei con el Partido Comunista Chino.

"EE.UU. debe asegurarse de que cualquier información compartida esté despejada de detalles sensibles ”.

Cotton y Crawford advierten que Huawei podría tener acceso a escuchas de investigaciones judiciales y actividades de inteligencia que, por la cooperación entre ambos países, podrían terminar en manos del gobierno chino. En su misiva insisten en que EE UU “debe asegurarse de que cualquier información compartida con el gobierno español esté despejada de detalles sensibles que no deban llegar a China”.

España defiende sus protocolos de seguridad

El gobierno español sostiene que los sistemas contratados cumplen con el marco nacional de ciberseguridad y los estándares del Centro Criptológico Nacional, y que la gestión de datos se realiza bajo estrictos controles legales y técnicos. Sin embargo, la decisión de mantener a Huawei como proveedor clave en el almacenamiento de información altamente sensible ha generado críticas internas: agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil han señalado una “incongruencia estratégica” en materia de seguridad al depender de una empresa vetada por los principales aliados dela OTAN.

Si se atiende la petición de los legisladores estadounidenses, España podría ver reducida la información de inteligencia que recibe de Washington mientras mantenga contratos sensibles con Huawei. El gobierno español se enfrenta así a la presión de sus socios para reforzar su soberanía tecnológica y revisar sus relaciones con empresas tecnológicas chinas.

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