Ley trans

Ley trans: el PSOE quiere evitar los problemas judiciales del 'sí es sí', pero Podemos no acepta rectificaciones

El nuevo choque entre el gobierno de coalición impide que haya acuerdo para la aplicación de la ley trans

Publicidad

La ley trans es una de las leyes que está generando conflicto en el gobierno entre el Partido Socialista y Unidas Podemos. Existe una discrepancia entre las dos formaciones. El PSOE propone que los menores de entre14 y 16 años tengan que presentar una autorización judicial para cambiarse de sexo, a diferencia de Podemos que quiere que a esa edad lo puedan hacer sin ningún filtro judicial, solo con asistencia de los padres o de los tutores.

Al no llegar a un acuerdo, el PSOE no quiere que esto comporte problemas judiciales como los de la ley del'sí es sí'. Por otra parte, Podemos no quiere oír de cambios que pongan en cuestión, otra vez, la calidad de las leyes que salen de sus ministerios.

Las acusaciones de Podemos

"La propuesta del gobierno es la ley que está ahora mismo en tramitación. Pero, efectivamente, el Partido Socialista ha decidido presentar enmiendas y no buscar acuerdo. Por tanto, estamos en un momento difícil de la tramitación", ha reconocido la ministra de Igualdad, Irene Montero. A pesar de estas acusaciones del partido morado, los de Pedro Sánchez siguen defendiendo sus enmiendas dirigidas, sobre todo, a la discusión en la edad de los menores para tener autorización judicial, ya que desde el PSOE lo justifican como un refuerzo a la seguridad jurídica de los menores.

Además, Podemos también acusa a su socio de gobierno de querer pactar con la oposición a sus espaldas. "El partido popular y el partido socialista pueden decidir intentar imponer un recorte en derechos en la ley trans", ha añadido la ministra de Igualdad.

Frente a estas cuestiones, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha recordado que "el partido socialista tiene la mayoría en la cámara". El PSOE quiere blindar la ley, pero a cambio de un punto que para Podemos siempre ha sido una línea roja: la autodeterminación de género.

Publicidad