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NAVEGA CON NIÑOS ENFERMOS

El sueño de Álvaro se hace realidad póstumamente gracias a su padre: "Hay que ayudar"

El sueño de Álvaro era llevar a navegar a niños enfermos: quería hacerlo cuando se recuperara de la leucemia, pero no pudo hacerlo y murió con 27 años. Después de su muerte, su padre Fernando lo ha hecho realidad. El mar no les cura, pero estos niños salen del hospital y son felices.

A pesar de ser un gran navegante, Álvaro no pudo hacerle frente al peor temporal de su vida: "Se cayó de la bici y empezó a dolerle la espalda... el dolor no se iba y al final le vieron leucemia", cuenta su padre. Pero eso no consiguió borrarle la sonrisa.

Su padre, Fernando, recuerda la lección de vida que le dejó: "Hay que ser feliz y ayudar". De ahí surgió la idea 'navega con Álvaro', un proyecto para hacer realidad el sueño de Álvaro: convertir el mar en la ilusión de niños enfermos.

"Para ellos un día de fiesta", relatan los padres de los niños. Un barco con el que navegan hacia la vida.

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