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Deporte

El cambio radical de Sue Reynolds, pierde 90 kilos y pasa de sufrir obesidad mórbida a triunfar en el triatlón

El triatlón ha ayudado a Sue Reynolds a dejar atrás la obesidad: el año pasado, con 67 años, representó a Estados Unidos en su rango de edad.

Sue Reynolds ha cambiado radicalmente: por el camino se han quedado 90 kilos de peso y muchas barreras derribadas gracias al deporte. Con 59 años era obesa, ahora es una de las mejores triatletas del mundo de su categoría. El deporte cambia vidas y no hay más que conocer la suya.

"Pesaba 150 kilos y era obesa mórbida", reconoce Sue. Cinco años después llegaba a su mayor éxito: "Fui sexta del mundo en los mundiales de Triatlón".

A los 59 años, Sue Reynolds sufría obesidad mórbida y tenía graves problemas de salud. Sin embargo, entonces decidió dar un cambio radical a su vida y comenzar a seguir una dieta saludable y a hacer ejercicio. Sue empezó a pasear y después a correr. También probó con la natación. Cuando todavía tenía sobrepeso, Reynolds debutó en el triatlón.

"Serían unos 100 metros. Me tiré al soca, había caminado diez minutos", admite Sue.

Y así comenzó poco a poco a cambiar su físico. Hasta que un día su hijo le apuntó a una carrera de cinco kilómetros.

"Le dije: '¡Eso es para atletas! ¡Soy obesa! ¡Estás loco!'", recuerda Sue.

En su primera prueba acabó la última, pero después llegó a presentar a Estados Unidos en el Mundial de la ITU de su categoría. Ahora, a los 67 y con 90 kilos menos -llegó a pesar 152 kg- se convirtió en una estrella de este deporte y en una inspiración para muchas personas.

"Es reversible"

"Había tantas cosas que no podía hacer. No pude entrar en la mesa de un restaurante, no podía sentarme en un avión, si tenía una reunión de trabajo y y para ir tenía que caminar una manzana, ya no podría ir", cuenta Sue Reynolds. Sin embargo, manda un mensaje optimista: "Tener sobrepeso no es una enfermedad; es reversible".

"Es posible perder peso a la vieja usanza si tomas buenas decisiones. Nunca soñé que podría ponerme frente a un espejo y flexionar mis músculos. Pero se necesita paciencia. Sé que muchas mujeres de mi edad llevan un atleta dentro", apostilla.

Los investigadores de la Escuela de Medicina Brown Alper han estudiado la importancia de fijar un horario constante a la hora de hacer deporte y perder peso.