Las inspecciones continuarán en el futuro
La crisis del sector vitivinícola el año pasado por la importación de uva foránea para el uso en la elaboración de vinos de Canarias ha provocado que el gobierno de Canarias realice inspecciones en las bodegas para tratar de detectar posibles fraudes. Hoy se han dado a conocer los datos de esta inspección. Tan solo una bodega ha perdido la categoría de Denominación de Origen por intentar usar uva de fuera para elaborar caldos propios.
En Canarias se importaron el año pasado unos 600 mil kilos de uva, la mayoría a la isla de Tenerife. No es ilegal importar uva pero sí usarla para hacer vinos con denominación de origen. Las inspecciones realizadas por agricultura han acabado con 9 sanciones a bodegas, una de ellas ha perdido su calificación de denominación de origen.
Y las sanciones son duras, de 4000 a 150 mil euros de multa. A raíz de la polémica generada el año pasado por la importación de más de 110 mil kilos de uva para bodegas insulares en Tenerife, la mirada estaba puesta sobre los viticultores. Esta campaña pretende evitar toda sospecha.
Se han inspeccionado el 25 % de las bodegas de las islas y la idea es mantener estos controles para garantizar la calidad del vino.
