Plan de prevención contra el "picudín"

Es mucho más pequeño que el picudo rojo, pero los efectos del picudín son igual nocivos para las palmeras.

Este pequeño insecto es un gran depredador, sobre todo en su etapa inicial, cuando son larvas.

En 20 años la plaga, que inicialmente se concentraba en los palmerales del sur de la isla, se ha extendido hasta el norte de la isla, llegando hasta Arucas.

Este trozo de tronco está completamente podrido y se cae a pedazos. El picudo ha extendido un hongo por toda la planta.

Pero estamos a tiempo de atajar sus efectos. Ya se está haciendo un balance de las palmeras afectadas para atacar de raíz a este pequeño inquilino cuyo hambre es voraz.