Las obras de la cuarta y última fase de la circunvalación de Las Palmas avanzan a gran ritmo desde que el Cabildo de Gran Canaria promoviera un acuerdo para adelantar la financiación.
En junio del próximo año se abrirá al tráfico el tramo que une la primera fase de la circunvalación con Arucas. Son 4 kilómetros y medio que hoy hemos recorrido con los ingenieros que coordinan los trabajos.
La actividad se ha recuperado en esta importante obra de manera notable, después de dos años en los que los trabajos estuvieron prácticamente parados. Los primeros resultados serán visibles en marzo del próximo año, cuando se abra un primer tramo, entre el final de la actual circunvalación y la nueva rotonda de las mesas.
El resto del tronco, hasta alcanzar los 4 kilómetros y medios que unirán Arucas con la capital, estarán operativos el próximo verano.
Se circulará sobre el puente de Tenoya, medio kilómetro de longitud y 118 metros de altura, y por otros dos de dimensiones inferiores en los que se trabaja con intensidad.
La cuarta fase tiene un presupuesto de casi 120 millones de euros. Los dos últimos kilómetros, entre el enlace de Arrucas que se inaugura en junio y la autovía del norte, tendrán que esperar hasta 2019 porque el plan financiero así lo establece.
