Nuevo tema de confrontación entre el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria. Todas las aguas que se depuran en la isla y se vierten al mar están limpias, Antonio Morales ha vuelto a insistir en ello, después de que el Gobierno asegurara que no es así. La consejera regional de Medio Ambiente afirma que el setenta por ciento de los emisarios no tienen autorización.
Acompañado por una columna de informes sobre la calidad del agua que vierten las depuradoras de Gran Canaria, el presidente del Cabildo ratificaba sus declaraciones de ayer y salía al paso de las manifestaciones de hoy de la consejera de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias.
Morales acusa Barreto de mezclar conceptos.
La consejera dice que la depuradora de Jinámar tiene problemas.
Morales acusa al gobierno de crear una cortina de humo.
Morales recordó que la depuración ha sido prioridad del cabildo desde hace años independientemente de quién gobernara.
