Lo hallaron muerto en la cama de su celda con una bolsa en la cabeza, todos dijeron que Philipp se había quitado la vida aunque sus padres nunca lo creyeron. Desde hacía meses estaba internado en el centro de menores Nivaria, allí sufría un acoso constante por parte de otros menores, especialmente uno, Hacomar que ya ha sido juzgado. Hoy se sientan en el banquillo 6 vigilantes de seguridad y una educadora por haber permitido estas agresiones e insultos “Le pegaba varias veces y delante de la educadora y ella no hacía nada”A uno de ellos le acusan incluso de haberle agredido y amenazado de muerte“Chivato, cabron, hijoputa te voy a matar”
Philipp era un joven con problemas psicológicos, en el centro tenía un carácter tranquilo y tímido. Antes de morir estuvo 3 días sin querer salir de la celda en la que él mismo había pedido refugiarse “Philipp la verdad es que era un chico muy bueno, él siempre estaba calladitoTras 8 años de espera los padres de Philipp siguen insistiendo en que su hijo no se suicidó.Asegura que el centro no reunía los requisitos para atender a menores. Entre los acusados hay varios ex presidiarios y un traficante de droga, ninguno de ellos tenía ni formación ni experiencia en el trabajo con menores