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UNA HAZAÑA HEROICA

46 años del amerizaje de emergencia en el norte de Tenerife

El avión DC-3 volaba rumbo a La Palma cuando sufrió un problema, gracias a la pericia del piloto se salvó casi todo el pasaje, murió un hombre de un infarto.

Son los restos del Douglas DC-3 que hace ahora 46 años amerizó en la costa norte de Tenerife. Fue la hazaña de un héroe.  El avión que pilotaba hasta La Palma sufrió un problema de motor tuvo que realizar un amerizaje de emergencia en pleno atlántico. A pesar de estar rodeado de montañas y nubes pudo salvar la vida de  27 pasajeros.  Sólo uno de ellos falleció y fue de un infarto. Por ello fue sometido a un consejo de guerra, aunque antes de morir  fuera  homenajeado como un héroe y el reconocimiento más preciado, el de los supervivientes.

Sintieron que volvían a nacer y no es para menos, pudieron salvarse gracias a una lancha de pescadores que dio el aviso. Lo recuerdan los hijos de los que hace 46 años rescataron el único cadáver del accidente. La complicada inmersión de los buzos sin medios junto a la maniobra en pleno océano con mucho oleaje y poca tecnología hacen de este suceso una de las hazañas de más riesgo y mayor reconocimiento de la aviación de nuestra historia reciente.

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