Bobby es un peregrino muy especial que hace un año, vivió la tragedia del accidente del tren Alvia. Ahora vuelve a Galicia para rendir homenaje a su mujer.
Justo hace un año, este estadounidense pasaba unas vacaciones con su mujer por España. Desafortunadamente, el destino les llevó a subirse a ese tren, donde su mujer perdió la vida. "La encontré con unos golpes fuertes en la cabeza y en el cuerpo", relata Bobby, aunque gracias a la ayuda de unos habitantes de Angrois pudieron sacarla del tren aún con vida.
En el vagón en el que ambos viajaban, tras el descarrilamiento Bobby sólo pudo ver dos personas en pie. "Oía cómo los heridos se quejaban, así que nosotros dos nos encargamos de ayudar a la gente", cuenta el peregrino. Y mientras ayudaba, él confiaba en que alguien estaría haciendo lo mismo con su esposa.
Finalmente cuando la encontró encima de un pedazo de tren en las vías, gracias a unos héroes que la ayudaron a salir del vagón, aún pudo verla consciente aunque bastante grave.
Un año después de esta trágica historia, el maquinista que conducía aquel tren, pide perdón a través de una carta publicada en un periódico de Galicia. Cuando Bobby la lee, asegura que aún le queda coraje para perdonarlo, porque sabe que no lo hizo a propósito y está seguro, a este conductor le pesar muchos fallecidos a sus espaldas. Aunque también reconoce, "tenía que haber escrito esta carta de perdón hace mucho tiempo y no haber esperado un año para hacerlo".
Hace un año, Bobby viajaba a Santiago con su esposa para celebrar que llevaba superados cuatro años de cáncer. Un año después, este peregrino vuelve a Santiago de Compostela y se ha propuesto terminar el camino por muchas razones, por lo sucedido en aquel tren y porque ella y él estuvieran haciendo el camino juntos, como hubiera deseado.
