El tunning, una pasión sin frenos

La televisión les da ideas de cómo personalizar su vehículo. Empiezan a cambiarles las llantas, el color y terminan poniéndoles luces. Jorge se ha dejado todos sus ahorros en su coche, al que trata 'entre algodones' y no es una metáfora.

Son los 'locos del tunning', aquellos que se dejan tiempo y dinero, el que haga falta, para que sus vehículos tengan personalidad propia. Y esta pasión por las cuatros ruedas va de la afición más moderna a la más clásica.

Luis, por ejemplo, tiene diez coches de mediados del siglo XX. Una devoción por los vehículos que choca incluso con su mujer, quien pensaba que la pasión no le duraría mucho tiempo.Y ya lleva así, 30 años.

Pero ellas no se quedan atrás. Patricia está encandilada con su coche rosa, al que ha 'tuneado' a su gusto.

Aficiones que hay que cuidar y que hay que alimentar. Son distintos casos de las aceleradas pasiones que puede producir el mundo del  motor a cuatro ruedas.