Un octogenario se atrinchera en su casa de Oleiros (A Coruña) mientras dispara a la Guardia Civil

"Afortunadamente se quedó en un susto". Son las palabras de José Lagoa, el sargento que resultó herido en la localidad gallega de Oleiros, en A Coruña, después de que un hombre de 83 años se atrincherase en su casa tras ser denunciado por su expareja por violencia de género. Al llegar la Guardia Civil al domicilio del hombre, expolicía nacional y poseía armas, comenzó a disparar a los agentes.

En Espejo Público el agente ha relatado cómo vivió esos duros momentos y, al ser preguntado, el agente ha indicado que recordar ese suceso "No le trae buenos recuerdos" y que casi no está allí para contarlo.

Los hechos ocurrieron en la noche del viernes en la Rúa dos Niños, donde el octogenario disparó con una escopeta a la puerta y a través de las ventanas, de modo que las esquirlas del proyectil y el polvo de vidrio de las ventanas, alcanzaron al agente en el cuello, hiriéndolo sin gravedad. El guardia civil fue trasladado a un centro médico, donde le realizaron curas y comprobaron que estaba fuera de sin riesgo.

En un primer momento, la Guardia Civil acudió al domicilio porque la exmujer del agresor había interpuesto una denuncia tan solo unos minutos antes. Según las resoluciones judiciales, el anciano atrincherado en Oleiros padece un trastorno psiquiátrico, ante las que el agente no ha querido pronunciarse.