¿Sirven para algo las cremas deportivas?

El número de lesiones musculares va en aumento y por múltiples razones: un par de ellas es que mucha gente se lanza a hacer deporte sin ningún tipo de preparación, asesoramiento ni calentamiento (lesión garantizada) y otra se sobrecargan en exceso y ahí está la lesión también.

Los fisioterapeutas suelen recomendar distintos tipos de cremas deportivas para cuando aparecen las lesiones pero también, para prevenirlas y así, muchas de ellas se recomiendan antes de lanzarse al ejercicio en cuestión.

Hay muchos tipos de cremas y de aceites para fisioterapia pero conviene, antes de comprarlo, primero que te dejes asesorar por un experto en la materia y después que tengas claro cuál es el objetivo que quieres lograr con la aplicación de la crema.

Suelen haber dos tipos de crema: las de efecto frío y las de efecto calor. Las dos tienen poder analgésico y antiinflamatorio (que previenen o reducen inflamaciones localizadas provocadas por tejidos musculares o ligamentos) pero cada una de ellas está indicada en un momento determinado.

Efecto calor

Aumentan la temperatura de la zona donde se apliquen, aumentando el flujo sanguíneo y acelerando el metabolismo celular. Se recomiendan aplicarlas antes del ejercicio para preparar de esta forma al cuerpo para el posterior esfuerzo.

Efecto frío

Reducen la temperatura de la zona donde se aplican y su objetivo es reducir el dolor y la inflamación después del entrenamiento, relajando la zona que ha sufrido ese sobre esfuerzo.

Estas cremas, muchas de ellas elaboradas a partir de plantas, tienen muchos beneficios como prevenir problemas musculares, reducir el riesgo de lesiones, de hematomas y contusiones, mejoran la circulación sanguínea y además, aumentan la elasticidad muscular y mejorar el estado de la piel, gracias al aporte hidratante.

A este respecto, incluso hay algunas marcas que recomiendan usarla como crema hidratante. ¿Suena descabellado? Te duches por la mañana o por la noche, la crema multifunción tiene su lógica. “El agua caliente de la ducha reseca la piel por lo que es imprescindible hidratarla después. Para rentabilizar al máximo el tiempo te proponemos que uses una crema hidratante multifunción, que nutra tu piel y a su vez, ayude a tus músculos y articulaciones a afrontar mejor el día o a relajarse tras una dura jornada de trabajo”, recomienda la firma de cremas deportivas Kyrocream.

Este tipo de cremas tienen altas concentraciones de árnica, hipérico y caléndula, tres plantas reconocidas desde la antigüedad por sus grandes cualidades en la prevención y recuperación de problemas musculares y articulares, así como por mejorar el estado de la piel, aportando hidratación y bienestar.

En función de si lo vas a hacer por la noche o por la mañana, será más aconsejable la de calor (por la mañana, antes de empezar el día) y la de frío tras la ducha de la noche.