EFECTOS SECUNDARIOS

¿Sabes cuál es la relación entre el cáncer y la salud bucal?

Se recomienda a las pacientes enfermas supervisar su boca antes, durante y después del tratamiento oncológico.

Dentista examinando a paciente

Dentista examinando a pacientePexels

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Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada doce mujeres sufrirá cáncer de mama a lo largo de su vida. Decenas de mujeres se enfrentan diariamente a este diagnóstico tan duro, luchadoras que deben recurrir a tratamientos agresivos para eliminar ese mal de su cuerpo.

La quimioterapia y otros tratamientos empleados tienen afectaciones importantes en el cuerpo de las pacientes. Una de las partes visibles que sufre más las consecuencias es la cavidad bucal. Entre las patologías que suelen aparecer, se detectan aumentos de caries, infecciones o incluso cambios en la apariencia dental.

Para entender esta relación, la doctora Eugenia Cervantes de la Clínica Eugenia Cervantes nos explica la importancia de la higiene dental en pacientes con cáncer de mama.

Qué relación existe entre el cáncer de mama y la higiene dental

Antes de iniciar cualquier intervención, es fundamental que el profesional esté informado del estado de salud de la paciente. Se trata de un paso muy importante, porque cualquier tipo de afectación bucal puede tener una incidencia directa en la cura del cáncer.

Antes de iniciar el tratamiento

La dentista Cervantes indica que es esencial mantener una buena comunicación entre profesionales de la salud - dentista y oncólogo - para saber en qué situación se encuentra la enferma. Además, es fundamental revisar el estado bucal para saber qué necesidades presenta, por medio de una radiografía y un estudio completo.

En aquellos casos donde se presentan caries, padecen infecciones o necesitan extracciones, Cervantes indica que lo mejor es intervenir mínimo dos semanas antes de empezar la quimioterapia.

Una buena higiene durante el tratamiento

Cuando la paciente ha iniciado el tratamiento, se deben evitar todo tipo de intervenciones. Por ello, durante el proceso es esencial que mantengan una buena higiene bucal para evitar la aparición de estas patologías, pues "cualquier problema derivado de la higiene puede complicar su tratamiento oncológico".

La doctora Cervantes recomienda cepillar los dientes 3 veces al día, usando cepillos de cerdas suaves, pastas con flúor o con hidroxiapatita, un componente que protege el esmalte. Además, es imprescindible mantener una buena hidratación, porque el tratamiento puede reducir los niveles de saliva.

Tras la quimioterapia

Al acabar el tratamiento, la doctora indica que durante los primeros meses se debe hacer un control para conocer cuál ha sido la afectación de la terapia. Los diagnósticos más típicos suelen ser sequedad bucal, pérdida del gusto o dañado del esmalte dental. Precisamente, este tipo de problemas "aumentan la incidencia de caries e infecciones" e incluso la aparición de fracturas o cambios de color.

Para aquellas intervenciones más delicadas como extracciones o implantes, la experta indica que se deben esperar de seis meses a un año, ejerciendo una brillante higiene dental para evitar nuevos problemas o que se agraven los existentes.

Cómo afecta la quimioterapia a la estética dental

Más allá de los efectos secundarios sobre la salud, el proceso personal y el duro tratamiento por el que han pasado las mujeres incide profundamente en el estado de ánimo. Tras la etapa de la enfermedad, es clave "ver cómo está la parte estética y funcional de la paciente, que también hay que restaurarla", explica Cervantes.

Además, añade que hay distintos tratamientos estéticos que sirven para devolver la seguridad y la autoestima en las pacientes afectadas. De esta forma, al mejorar su apariencia física, contribuyen a aumentar su calidad de vida.

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