QUERÍA TENER DESCENDENCIA

La última voluntad de Álex Lequio, el hijo de Ana Obregón: ¿Qué es un testamento ológrafo?

En una entrevista en HOLA!, Ana Obregón ha explicado que una semana antes de fallecer, su hijo dijo que su última voluntad era “traer un hijo suyo al mundo". Eso se llama testamento ológrafo y en este artículo te explicamos en qué consiste y en qué se diferencia de un testamento tradicional.

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La entrevista en exclusiva de Ana Obregón en HOLA! ha traído cola. Durante la charla, la actriz, presentadora y bióloga se ha abierto en canal y ha respondido a la pregunta que ha intrigado a toda España desde que salió del hospital con un bebé en brazos: ¿De quién es hija?

"Lo primero que tienes que saber es que esta niña no es mi hija, sino mi nieta. Es hija de 'Aless' y cuando crezca le contaré que su padre fue un héroe, para que sepa quién es y lo orgullosa que tiene que estar de él", ha explicado para acabar con todos los rumores.

Su última voluntad

Obregón, acusada por los fans de haber "comprado un bebé" por mero capricho, ha desvelado que Ana Sandra -ese es el nombre de la criatura- fue "la última voluntad de 'Aless'. El hijo de la presentadora y de Alessandro Lequio, que falleció en mayo de 2020, víctima de un sarcoma de Ewig, quería "traer un hijo suyo al mundo".

"Así nos lo comunicó de palabra a su padre y a mí una semana antes de fallecer", añade la intérprete de 'Ana y los 7'. Eso significa que el deseo de tener descendencia fue parte de su "testamento ológrafo", ese que "se produce cuando una persona, ante dos testigos, expresa sus últimos deseos, aunque, por las circunstancias que sean, el notario no pueda estar presente. Este documento existe y es legal", describe la presentadora.

Sin embargo, aunque Obregón insista que este tipo de documento es igual de válido que un testamento ante notario, tiene que cumplir unos requisitos que se recogen en nuestro Código Civil.

Cómo funciona el testamento ológrafo

Comencemos por el principio. Un testamento ológrafo es un documento de última voluntad en el que una persona manifiesta cuáles son sus deseos tras su fallecimiento-normalmente la distribución de sus bienes- de forma completamente escrita y de su puño y letra. Este tipo de testamento se diferencia de otros testamentos en que no requiere la intervención de un notario o de testigos para su validez.

Pero para que esta clase de últimas voluntades sean válidas, nuestro ordenamiento jurídico exige que "se halle escrito y firmado íntegramente por el testador, con expresión del año, mes y día en que se otorgue" y que, en caso de contener "palabras tachadas, enmendadas o entre renglones", estas deben ir salvadas bajo la firma del autor del testamento. El nombre y apellido de la persona no valen como firma.

La regulación del testamento ológrafo en España se encuentra en los artículos 688 y 700 del Código Civil.

¿Qué ocurre con el testamento ológrafo tras el fallecimiento de su autor?

Como cuentan en la web abogadosyherencias.com, quien tenga en su poder este testamento, debe "presentarlo ante Notario en un plazo de diez días desde que sepa que el testador ha muerto". De no hacerlo, la ley establece una sanción “que deberá responder de los daños y perjuicios causados”.

Luego se lleva a cabo la adveración del testamento, que es el proceso a través del cual se comprueba su veracidad.

La importancia de la fecha

Aparte de escribir el documento a mano y firmarlo para que se pueda verificar la autoría, también es muy importante especificar la fecha, pues en España, el testamento ológrafo puede dejar sin validez cualquier testamento anterior. Esto significa que, si una persona realiza un nuevo testamento ológrafo que contradice o modifica los términos de un testamento ológrafo anterior, será el testamento ológrafo más reciente el que prevalecerá y se seguirá para la distribución de los bienes del fallecido.

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