ES TEMPORADA Y TIENE MUCHAS POSIBILIDADES
Diez cosas que hacer con una fresa
Es temporada de fresas y a muchos este dato nos hace muy felices. Esta fruta tan deliciosa como versátil, que solo llega unos cuantos meses al año (por desgracia, las fresas de invernadero juegan en otra liga), y no sólo se come con nata o azúcar, sino que puede degustarse de las más diversas maneras. Os sugerimos diez.
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1- El clásico: nata o azúcar. Es un postre irresistible, y más si seguimos consejos como dejarlas macerar durante una hora en azúcar antes de añadir la nata. Sólo hay que lavarlas, secarlas, añadir el azúcar y dejar que se mezcle con el líquido que van soltando las fresas, en la nevera, durante unas horas.
2- Con chocolate. De sobras conocido es el idilio de las fresas y el chocolate, que pueden degustarse de las más diversas maneras. Las fondues de fresas, a las que podemos añadir otras frutas como plátano o naranja, son una maravilla para combinar chocolate siempre caliente con frutas frescas, aunque existe otra manera de combinar fresas con chocolate que nos vuelve locos. Coloca las fresas en un plato junto a una bola de helado (nosotros solemos utilizar helado de vainilla, aunque nata o yogur también funcionan a la perfección, o incluso alguno con frutos secos, como almendras o nueces de Macadamia). Deshaz el chocolate, a poder ser al baño María, y cuando esté caliente viértelo con cuidado sobre la mezcla de fresas con helado. El contacto del helado frío con el chocolate caliente lo solidificará, y nos quedará un postre delicatessen que combinará diversos sabores sin apenas esfuerzo.
3- Helado. Hazte helado de fresa en casa y bastante todoterreno, pues va a ser del gusto de cualquier comensal. Si tienes mucha gente en casa, puedes comprar unas galletas especiales de helado y servirlo de postre, a modo de corte de helado. Te ahorrarás lavar platos.
4- Batido con galletas. Es una merienda que no suele fallar para los más pequeños, a los que generalmente suelen entusiasmar las fresas. Prepara un batido de fresas combinadas con un yogur griego y unas cuantas galletas María. Nada más sencillo y más delicioso, que además constituye una merienda contundente que les va a dejar satisfecho durante toda la tarde.
5- Licor de fresas casero. ¿Tienes una botella de aguardiente en casa que no vas a consumir? ¿O tal vez una botella de vodka? Con eso, un kilo y medio de fresas aproximadamente y un par de tazas de azúcar convertirás ese licor que para muchos resulta imbebible a palo seco en un agradable digestivo con sabor a fresas que te sentará de maravilla después de comer y te ayudará a hacer la digestión.
6-Mermelada. Otra receta casera muy fácil de hacer es la mermelada, que constituirá una buena manera de aprovechar las sabrosas fresas de temporada durante todo el año, pues un bote de mermelada correctamente sellado nos puede durar varios meses sin estropearse. La receta es sencillísima, pero no te confundas: no utilices erróneamente las fresas que están en peor estado, pues estropearán el sabor de la mermelada.
7-Fresas con zumo de naranja. Hay quien ama esta combinación, pese a que somos muchos, y nos incluímos, los que no somos capaces de ver los atractivos de esta combinación a priori contranatura, en que la acidez de la naranja suele acabar, a no ser que el plato esté bien hecho, con el abanico de sabores de la fresa. Si vas a preparar fresas con zumo de naranja, no las sirvas directamente: deja que maceren junto al azúcar guardándolos al menos una hora en la nevera.
8- Cóctel de champán y fresas. Hay múltiples recetas que combinan estos dos ingredientes que tan bien se llevan. Si tienes excedente de fresas en la nevera, una botella de champán o cava e invitados a cenar no lo dudes: ya tendrás un resultón cóctel de bienvenida.
9- Mousse de mascarpone y fresas. Solo imaginarte estos dos ingredientes por separado ya empiezas a salivar, pues piensa cómo sería tu vida si los tuvieses juntos, en un solo bol, en forma de una sabrosa y cremosísima mousse. Sólo necesitarás, además, un poco de azúcar y un yogur natural. Si decoras con unas hojas de menta la cosa puede ser el no va más.
10- Con leche condensada. Mezcla las fresas con la leche condensada, déjalas macerar en la nevera y listos, ya tendrás un postre delicioso con ingredientes que probablemente tengas en la nevera.
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