¿Qué es el pillow face o cara hinchada de algunas famosas?

El término pillow face hace referencia a la cara hinchada que lucen algunas personas como consecuencia de un mal uso de los rellenos dérmicos. Entre las celebrities se encuentran varios ejemplos como puedes ver en este artículo de NovaMás.

Los rellenos faciales pueden ser una gran herramienta para mejorar el déficit de volumen, la flacidez, el descolgamiento, la pérdida de elasticidad de la piel y otros signos que aparecen como consecuencia del envejecimiento.

En la actualidad los rellenos que se utilizan con más frecuencia son los de ácido hialurónico, pero también pueden emplearse para este fin la hidroxiapatita cálcica, la policaprolactona y el ácido poliláctico.

El aspecto de pillow face o cara hinchada aparece generalmente cuando se aplica un exceso de material de relleno, por este motivo es fundamental que estos tratamientos sean realizados por manos expertas tanto para obtener buenos resultados como para evitar complicaciones, algunas de ellas graves.

¿Por qué ocurre el aspecto de pillow face o cara hinchada?

• Aplicación excesiva de producto

Este es probablemente la principal causa. Por un lado, puede ocurrir por desconocimiento del profesional que aplica el producto y que se excede en cantidad de ácido hialurónico para corregir una flacidez muy pronunciada. Y en otras ocasiones ese profesional se deja influenciar por las exigencias del paciente que desea conseguir resultados perfectos o lucir unos pómulos muy pronunciados o unos labios muy voluminosos y acuden a la consulta exigiendo mayor cantidad de relleno. En estos casos es nuestra obligación explicar la importancia de la armonía y de respetar la naturalidad de la anatomía facial.

• Desconocimiento de la anatomía

Conocer la anatomía facial es imprescindible a la hora de obtener resultados armónicos, naturales y bonitos con los rellenos dérmicos, además de ser fundamental para evitar complicaciones.

Un ejemplo sería, desconocimiento de los compartimientos anatómicos del tercio medio y de la ojera, llevando a depositar un producto en una zona errónea que no le permita su integración y que se apreciará fuera de lugar o abultado.

• Inadecuada selección del producto

A la hora de elegir el tipo de ácido hialurónico que se va a infiltrar se debe tener en cuenta el área de la cara, si es móvil o fija, si la piel que la recubre es fina o gruesa, el resultado que queremos obtener, y otras muchas variables. Por ejemplo, el ácido hialurónico que se emplea para la zona de los pómulos no será el adecuado para la ojera o el que se emplea para el mentón tampoco lo será para los labios.

• Mala técnica

Realizar una técnica inadecuada puede hacer que luzcas hinchada o con bultos. Por ejemplo, si infiltramos muy superficial el ácido hialurónico en la ojera, se apreciará un aspecto de ojos hinchados y bolsas. Asimismo, si se aplica el ácido hialurónico muy superficial en los pómulos, pueden lucir hinchados o como pelotas.

Por estos motivos siempre debes acudir a médicos especialistas en el área de la medicina estética, que sean conocedores de la anatomía facial, de una adecuada técnica y de la variabilidad en los rellenos de ácido hialurónico. Con la medicina estética se busca resaltar tu belleza o devolver un aspecto más jovial a tu rostro, respetando la anatomía y evitando buscar rasgos muy marcados o que te hagan lucir excesivamente tratada.

Tamara Falcó cuenta que ha estado en una clínica macrobiótica durante las vacaciones de Navidad: ¿qué es y qué consigues en ella?

-