Publicidad

de nuevo en el banquillo de los acusados

El 'estafador del amor' de Barcelona acusa a su expareja de promover denuncias "en masa"

Albert se enfrenta esta vez a una acusación por hacerse pasar por bróker y estafar supuestamente 2.500 euros a una mujer, con la que mantuvo una relación amorosa.

Albert C., el hombre al que más de una veintena de mujeres acusan de estafa, se ha declarado inocente en un nuevo juicio y ha asegurado que la principal responsable de las 16 denuncias en su contra es su expareja, que está "organizando" lo que se ve "por televisión constantemente". El juzgado de lo penal número 1 de Barcelona ha juzgado por un delito de estafa a Albert C., para quien la Fiscalía pide dos años de cárcel por hacerse pasar por inversor de bolsa para seducir a la denunciante, C.A., y pedirle la cantidad de 2.500 euros que todavía no ha devuelto.

Durante el juicio, el presunto estafador ha asegurado que su relación con la mujer era de amistad y que nunca dijo ser inversor, sino que reconoció estar en paro. Frente a las conversaciones y pruebas que constan en la causa, el acusado ha reiterado que no reconoce su forma de hablar y que todos esos mensajes han sido "manipulados", ya que no recuerda haberlos escrito. La acusación particular, por su parte, imputa estafa al procesado y mantiene que desde el primer momento Albert C. aseguró a C.A. que "recibiría en el margen de 4 días el doble del dinero aportado".

En las pruebas documentales expuestas durante el juicio se ha podido escuchar cómo el acusado prometió, a través de un mensaje de voz, realizar un contrato "entre 'partners" para que la acusada "se quedara tranquila", pero dicho documento nunca llegó a presentarse. A.C. ha mencionado también haberle dado a la demandante un anillo "por valor de 1.000 euros" como compensación hasta que fuera capaz de devolverle el dinero, que según él fueron 1.090 euros y no 2.500.

El acusado dice también que C.A. ha mostrado desinterés por recuperar su dinero y ha afirmado que ella únicamente lo ha denunciado por un movimiento originado por su expareja, que presuntamente le robó el teléfono para contactar con otras chicas supuestamente estafadas.

En el juicio, que ha quedado visto para sentencia, ambas partes han reconocido estar dispuestas a hacer un "trueque" y cambiar el anillo, en posesión de la demandante y que mantiene que tiene un valor de 100 euros, por el dinero, que el demandando asegura es inferior al expuesto por la acusación.

Publicidad