Estas son las imágenes aéreas que deja la ciudad de Madrid después del paso de la nevada provocada por la borrasca Filomena.
La borrasca Filomena afectó ayer a buena parte del centro peninsular y colapso la capital madrileña con una gran nevada. En algunas partes de la región, la nieve llegó a alcanzar una capa de más de medio metro de espesor en una nevada no vista desde las tres últimas décadas.
La cara más amable del temporal nos deja hoy unas imágenes de la capital cubierta por un manto de nieve tras la insólita borrasca. Esquiadores por la Gran Vía, un trineo tirado por perros y una batalla campal de bolas de nieve en plena plaza de Callao fueron también ayer algunos de los protagonistas.
La borrasca Filomena se desplaza ahora al norte peninsular y da paso a heladas generalizadas en toda la geografía española. Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología, mañana se mantendrán las temperaturas por debajo de las mínimas habituales por esas fechas y el temporal provocará lluvias intensas en las zonas litorales del Estrecho, Alborán y Baleares.
Trabajo a contrarreloj
A lo largo del día de hoy, la Comunidad de Madrid trabaja a contrarreloj para despejar los restos de nieve acumulados antes de las heladas. Operativos de la Unidad Militad de Emergencias (UME) han colaborado esta madrugada para limpiar los accesos a los hospitales, centros de abastecimientos y farmacias.
Desde la administración madrileña han creado hoy un equipo de trabajo y coordinación para asegurar los suministros alimenticios, hospitalarios y energéticos a toda la región. Entre los objetivos principales de este grupo está facilitar la salida de los camiones que quedaron retenidos ayer en áreas de descanso por la borrasca para que puedan acceder a los diferentes puntos logísticos y el relevo de los trabajadores esenciales. Debido a la gran nevada provocada por el temporal, gran parte de los sanitarios quedaron atrapados en los hospitales y tuvieron que doblar turnos.