Convergencia (CDC) ejercerá la portavocía del grupo Mixto en el Congreso durante los próximos ocho meses en virtud del reparto de turnos que ha acordado con el resto de formaciones minoritarias. Los representantes de las siete formaciones que van a estar esta legislatura en el Mixto -CDC, Compromís, EH Bildu, UPN, Coalición Canaria, Foro Asturias y Nueva Canarias- han mantenido una reunión en el Congreso para organizar el trabajo interno, estudiar la distribución de escaños en el hemiciclo y repartirse los asistentes que les corresponde en función del número de diputados.
En una rueda de prensa posterior, el portavoz de CDC en el Congreso, Francesc Homs, ha informado de que será el portavoz del grupo durante ocho meses, incluyendo agosto, puesto que su formación es la que más diputados tiene, con ocho, de un total de 19. Como suele ser habitual, el criterio que van a aplicar es que cada partido asuma la portavocía durante el número de meses equivalente a los escaños que tiene.
De este modo, después de CDC, Compromís tendrá durante cuatro meses la representación del grupo, seguido de EH Bildu, que lo hará dos meses, al igual que luego UPN, y el resto de formaciones que tienen un diputado asumirán el papel durante un mes cada uno, antes de iniciar una nueva rotación. Los partidos del Mixto han acordado además hacer una propuesta a la Mesa del Congreso sobre los escaños que quieren ocupar en el hemiciclo en la parte central. Este asunto está pendiente de resolver puesto que hay discrepancias entre Podemos, ERC y el Mixto sobre cómo repartirse los asientos que Convergencia ha dejado libres al no tener grupo propio. Homs ha considerado que el Mixto, al ser el quinto grupo con más diputados, debe tener una posición en la Cámara acorde con su peso.
No obstante, ha pedido quitar importancia a este debate: "Me aburre, no sabe hasta qué punto. Si el problema de este país es dónde nos sentamos en el hemiciclo, me daría un poco de vergüenza". A pesar de que el Mixto cuenta ahora con más miembros que en la anterior legislatura, cuando había 14, los partidos no creen que sea un obstáculo para el entendimiento. El portavoz de Compromís, Joan Baldoví, ha convenido en que los minoritarios "sabrán estar a la altura y convivir con opciones diferentes".
"El grupo Mixto es un lugar donde se aprende convivencia", ha sostenido Baldoví ante la diversidad de perfiles territoriales e ideológicos de los que partidos que están en él. La diputada de CC, Ana Oramas, se ha mostrado convencida de que no habrá problemas de funcionamiento, pese al aumento del número de componentes y a que hay partidos "opuestos políticamente". "Nunca ha habido conflicto ni tensión. Está todo muy estructurado, hay experiencia y hay asuntos rotatorios", ha comentado Oramas a los periodistas antes de la reunión.
El diputado de EH Bildu Oskar Matute ha lamentado que el Mixto vuelva a ser "maltratado", ante el incremento del número de sus escaños, si bien ha confiado en que puedan garantizar "la pluralidad y visibilidad" de las formaciones que lo integran.
