Trail

Oriol Antolí gana la Suffolk Backyard Ultra tras correr 550 kilómetros en tres días

Esta ultramaratón consiste en recorrer en una hora a un circuito de 7 kilómetros hasta que solo quede uno. El catalán ganó en Reino Unido después de completar 82 vueltas y dormir media hora.

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Para ganar una backyard ultra no solo hay que correr, también que vencer al cansancio y a la mente. Oriol Antolí hizo historia en la prueba celebrada Suffolk (Reino Unido) de esta disciplina extrema. El catalán corrió 550 kilómetros seguidos durante tres días y medio y así llevarse el triunfo final. Es el récord absoluto de la competición y la mejor marca española de la historia.

Consideradas como ultramaratones, la dureza lleva al límite a todos los participantes: "Cada hora se va dando la salida, con lo cual en una hora tienes que hacer el recorrido". Los 200 corredores se enfrentaron a un circuito de 6,7 kilómetros por el bosque. Oriol se salió y dejó a todos sus rivales en la lona porque completó 82 vueltas, la octava mejor marca del mundo. "Estoy súper contento, me da mucha confianza", admite a Antena 3 Deportes.

"Dormía cuatro o cinco minutos como máximo"

Una hora es la duración máxima de cada vuelta. Quien no llega al corte se elimina, pero quienes acuden a tiempo pueden aprovecharlo: "El tiempo que te sobra lo puedes utilizar para descansar, cambiarte de zapatillas, dormir...". El del sueño es uno de los aspecto más impactantes como reconoce el corredor catalán: "Dormía cuatro o cinco minutos seguidos como máximo. En toda la carrera, la suma total será una media hora".

Estrategias para el sueño y el hambre

La relevancia que le otorga Oriol a la planificación es absoluta: "Es parte de la carrera, casi la más importante. Si llegas sin estar preparado, no vas a ningún sitio". Conocer el circuito, el tipo de calzado o la meteorología serían los aspectos habituales, pero las backyards ultra son otra historia: "Necesitas estrategias por si te viene el sueño o problemas de estómago para saber cómo solucionarlo".

Si la exigencia ya es máxima en el apartado físico con 550 kilómetros, la cabeza juega un papel más que determinante después de una vuelta tras otra: "Mentalmente es difícil de asumir y yo creo que es lo más complicado de las backyards". El catalán ahonda en sus consejos: "No pensar en el final porque no sabes cuándo va a ser. No hay una meta física".

"Pensé que podría haber hecho más vueltas"

Como cabía esperar, Oriol Antolí acabó exhausto la backyard de Suffolk: "Estoy realmente cansado". Sin embargo, días después reconoce que su cabeza era ambiciosa: "Cuando acabamos, yo pensé que podía que hubiera podido hacer más". Los belgas Merijn Geerts e Ivo Steyaert ostentan el récord absoluto de las backyards con 101 vueltas, 19 más de las que completó el corredor español. Aún quedan lejos, pero de momento el Mundial espera en octubre en Tennessee (Estados Unidos) y Oriol Antolí ya ha presentado su candidatura.

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