En Elche la Semana Santa ha arrancado con fuerza con la procesión de 'El Borriquito' y miles de ilicitanos la han acompañado con la tradicional palma blanca.
Sus calles se han llenado de turistas y peregrinos que han acompañado el paso durante horas. Como cada año, se han podido ver enormes palmas artesanales, algunas de ellas llegan incluso a medir más de tres metros de altura.
Un año más, los ilicitanos han arropado con multitud de palmas blancas -lisas, rizadas o de solapa- al conocido como "pas de la burreta" al ritmo de cornetas y tambores de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Hermandad de la Flagelación y Gloria.
El sol ha sido protagonista en una procesión en la que han participado más de 60.000 personas, según datos de la Policía Local, que como marca la tradición han lucido galas para celebrar la entrada de Jesús Triunfante en la ciudad.
Minutos antes del inicio de la procesión, se ha realizado la bendición de las palmas en el paseo de la estación a cargo del vicario episcopal. A este rito se une la costumbre de colgar de los balcones de las casas las palmas bendecidas, como símbolo de protección.
El Domingo de Ramos de Elche fue declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional en 1988 e Internacional en 1997, pero su primer conocimiento es de 1371, según se conserva en el Archivo Municipal de la ciudad.
Este año el "pas de la burreta", adornado sólo con palma blanca, ha sido portado a hombros por los costaleros de la cofradía de Nuestro Padre Jesús Rescatado, que cumple 35 años de su fundación.