Sobre ellos recaían varias órdenes de alejamiento. Los gritos de las víctimas fueron los que alertaron a los vecinos que inmediatamente llamaron a la policía. Se saltan la orden de alejamiento, encierran a sus parejas en sus domicilios y las retienen durante horas. Los hechos ocurrieron supuestamente en Arona, al Sur de Tenerife. Las víctimas, de 48 y 50 años, padecían claustrofobia y ya no vivían con sus presuntos raptores.
Los gritos de las víctimas y los fuertes golpes que producían alertaron a los vecinos quienes posteriormente avisaron a la Policía Local. Cuando los agentes llegaron al domicilio las víctimas se encontraban en un estado de ansiedad y gran nerviosismo. Para acceder al interior de la vivienda la Policía tuvo que solicitar la intervención de los bomberos. Las mujeres no quisieron denunciar porque aseguran tener miedo. Los vecinos de la zona conocen de primera mano lo sucedido en la vivienda pero el miedo a posibles represalias les impide hablar, además aseguran que en el barrio impera la Ley del Silencio.
Finalmente localizamos a algunas personas dispuestas a hablar a nuestras cámaras. Minutos más tarde, los supuestos raptores acudieron al domicilio donde tenían retenidas a sus ex parejas. Inmediatamente, los dos hombres fueron detenidos y puestos a disposición judicial