Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para aclarar la actuación de cuatro agentes que redujeron a un joven, al que se le echaron encima en una intervención grabada en vídeo por un vecino.
El director de los Mossos d'Esquadra, Albert Batlle, ha asegurado que la reducción de un joven en Barcelona, que fue grabada por un vecino, no obedeció a que pidiera el número de placa a los agentes, sino que opuso resistencia a que los policías se llevaran un Ipad que supuestamente había robado.
En la grabación se ve cómo uno de los agente le sujeta del cuello
En una rueda de prensa tras la difusión en las redes sociales del vídeo con la reducción policial, ocurrida el pasado miércoles día 28 por la noche en la plaza del Pou de la Figuera de Barcelona, Batlle ha confirmado que ha ordenado a la División de Asuntos Internos (DAI) que abra una información reservada para evaluar la intervención policial.
A la espera de las conclusiones de la investigación interna, el director de los Mossos ha evitado responder a las preguntas sobre si la actuación de los agentes fue oportuna y proporcionada, y se ha limitado a afirmar que fue una "detención con el uso de la fuerza".
"Que nadie saque conclusiones precipitadas", ha pedido Batlle, que ha indicado que el objetivo de la investigación interna es determinar si la intervención de los agentes "se ajustó a los procedimientos".
Según Batlle, los hechos ocurrieron cuando una patrulla de los Mossos vio al joven, de 22 años, nacionalidad dominicana y con antecedentes policiales, en la plaza, en una actitud sospechosa con una tercera persona, ya que al parecer le estaba intentado vender un Ipad supuestamente robado.
Los Mossos argumentan que sospechaban que había robado un Ipad
Los agentes identificaron al joven y se incautaron de su Ipad -que era nuevo y estaba precintado en una caja-, ya que el chico no pudo acredita que fuera de su propiedad, por lo que le dijeron que al día siguiente se lo devolverían en comisaría si aportaba la factura. Según Batlle, el joven empezó a exigir entonces que le devolvieran el aparato -que todavía no se ha podido acreditar que fuera robado-, por lo que finalmente optaron por detenerle, empleando la fuerza, acusado de un delito de resistencia y atentado a la autoridad.
En el vídeo, colgado en las redes sociales, se ve cómo el joven está en una actitud aparentemente normal cuando dos de los mossos, que llevaban el casco de moto todavía puesto, y otros dos, que salieron del coche patrulla en el que guardaba el Ipad, se abalanzaron sobre el joven para reducirlo.
En las imágenes, grabadas por un vecino desde un balcón, se puede apreciar cómo uno de los agentes cogió por el cuello al joven y los otros tres se le lanzaron encima para lograr derribarle, lo que finalmente consiguieron tras una rápida intervención, después de recorrer unos cuentos metros mientras forcejeaban.
