"El mar se lo bebe todo", aseguró uno de los policías acusados de homicidio en Cartagena

Diego Pérez, con problemas mentales y toxicómano, es la víctima. Llamó al 091 porque unas personas, decía, le amenazaban. "Estoy aquí, que me quieren pegar, me quieren pegar dos tiros", explica el hombre al operador del 091, según se escucha en la grabación.

Esta es la forma en que el operador del 091 y los policías hablan del resultado de la visita. "Oye, lo del zumbado este de primera hora, al final ¿qué mierda era?", pregunta el operador del 091 a los agentes del coche patrulla. "Que le había robado las bicicletas a uno y lógicamente y justamente los otros habían ido a matarlo, así que nosotros hemos dicho: Oye, pues no está mal, que es lo legal, ¿no? Si han ido a cobrarse justicia pues…, que Dios lo ampare en su gloria", responden los componentes del coche patrulla.

Nadie vuelve a ver a Diego. Unas imágenes captan los coches patrulla yendo y volviendo de la playa donde unos senderistas encuentran su cadáver 15 días después, devuelto por el mar. Los policías ocultaron que le habían llevado allí..., hasta que son detenidos. Se ocultan micrófonos en sus coches. Nunca hablan del desaparecido.

El programa Espejo Público ha accedido en exclusiva a las grabaciones. En una ocasión bromean sobre sobre si uno de ellos contrata a los demás como escoltas. "No quiero detenidos ninguno", dice uno. "No quiero prisioneros, todos muertos", responde otro entre risas. "Hay un mar estupendo", responde el primero. "El mar se lo bebe todo", concluye su compañero.

La frase "el mar se lo bebe todo" llama la atención de quienes les investigan. La víctima falleció por diversos traumatismos antes de caer o ser arrojado precisamente al mar. Los seis policías están acusados de homicidio y detención ilegal.