El rector de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Ernesto Martíenz-Ataz, ha ordenado la apertura de un expediente informativo para depurar responsabilidades tras la inclusión en un examen de Selectividad de un artículo periodístico crítico con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, según han informado fuentes de la UCLM.
Estas mismas fuentes han explicado que la elaboración de los contenidos de los exámenes de Selectividad corre a cargo en cada materia de una comisión mixta formada por profesores de la propia Universidad y de profesores de Educación Secundaria propuestos por la Consejería de Educación.
Para dar forma a lo que serán los exámenes, entre los meses de marzo y abril dichas comisiones realizan ocho propuestas, de las que se eligen dos para los exámenes de junio, dos para la convocatoria de septiembre y otros dos de reserva. En este caso, han asegurado las mismas fuentes, el artículo periodístico fue propuesto por un profesor de Secundaria.
Disculpas de Ataz a Aguirre
Después de que se conocieran estos hechos, el rector de la UCLM se ha dirigido este mismo martes por carta a la presidenta de la Comunidad de Madrid para pedirle disculpas, asegurándole que la institución ya está trabajando para depurar responsabilidades y llegar al responsable de la utilización de dicho artículo en un examen.
El artículo periodístico formaba parte del examen de Lengua Castellana y Literatura, sobre el que los alumnos debían de hacer un comentario de texto.
Dicho artículo, obra del periodista Juan Carlos Escudier, se publicó el pasado 22 de mayo de 2010, y bajo el título 'Ya sabemos quién es pobre' retrataba de manera irónica la situación económica Aguirre después de que ésta expresara que tenía dificultades para llegar a fin de mes.
El periodista señala que la presidenta, entre "la gélida mansión madrileña, su fresneda en El Escorial con otro palacete tan frío como el primero, sus fincas ganaderas en Salamanca y Avila y sus propiedades en Guadalajara a pie del AVE, no se descalza por menos de seis millones de euros en ladrillos y dehesas".
En el texto, el autor afirma, entre otras cosas, que Aguirre "finge estrecheces pensando que ello le humaniza", algo en lo que hay "bastante obscenidad y un sentido del tacto que sería la envidia del Capitán Garfio".
