Espacio

España busca ser experta en agricultura lunar y ser el primer país con un invernadero espacial

El proyecto español Green Moon Project, pioneroen agricultura espacial, tiene un objetivo muy claro: llegar a entender cómo puede crecer una planta bajo los efectos de la gravedad lunar. Insisten en la importancia de dar visibilidad a su proyecto.

Imagen de la Luna llena al anochecer

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Green Moon Project es un proyecto de agricultura lunar que surgió en septiembre de 2016. De los 3400 proyectos, Green Moon Project se colocó entre los 15 primeros y se convirtió en el único equipo español en clasificarse. Un momento crucial para el equipo, que ya empezó a ser consciente de la importancia que el proyecto tenía e iba a tener.

A partir de ahí decidieron darle un giro mucho más profesional contado con ayuda nacional de la Universidad de Málaga, del Parque tecnológico de Andalucía y de empresas y centros de innovación. La profesionalización del equipo causó que, de 3 miembros -Gonzalo Moncada, Julián Serrano y José María Ortega-, pasara a 10 en 2017.

Pilares de la investigación

José María Ortega uno de los líderes del proyecto y explica que “en este estudio espacial sobre plantaciones lunares se juntan 3 pilares fundamentales: la geología planetaria, la ingeniería espacial y la biología vegetal". Además, ha señalado que "dentro de esta última se están realizando ensayos con cultivos hortícolas con hortalizas como el tomate y la lechuga, que son nutritivos y tiene un crecimiento rápido. Estas características van a empezar a medirse en la Luna”.

Apoyos y financiación

La agricultura lunar empezó acoger importancia a raíz de los pasos que China dio en esta materia, convirtiéndose en el primer país del mundo en plantar un semilla en la luna, reflejo de la importancia que estaba adquiriendo esta área. De hecho, el apoyo a la agricultura espacial está adquiriendo tal importancia que la financiación está alcanzando el sector de las empresas privadas y de otros países como Australia.

Green Moon Project cuenta desde 2017 con apoyo internacional de empresas andaluzas como Grupo Herogra e Indoplant, que están elaborando fertilizantes especiales. Además el suelo de Isla de Lanzarote tiene una composición basáltica y volcánica muy similar a la del suelo de la luna, de ahí que se use como análogo planetario para realizar ensayos.

El suelo de Lanzarote, similar al de la Luna

Aquí se juntan dos líneas de ensayo: la de realizar ensayos en el suelo de Lanzarote y otra paralela, el uso de un abono modificado. El proyecto se enfrenta a la gravedad y ya se están mandando semillas sin modificar, ya que, más allá de la agricultura, ahora miso el grupo se está centrado en la parte de ingeniería espacial. Se espera que, en menos de dos años, se envíe a la Luna el primer ensayo de invernadero, convirtiéndose así este ensayo en el primeo que se realice en el espacio

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