¡Enséñale a comer sano!
Cuatro meriendas saludables para el cole
Con el comienzo del curso escolar, también comienzan los quebraderos de cabeza con los almuerzos. ¿Quieres ideas que les puedas preparar y que además sea saludable?
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Hacerlo bien con la alimentación de nuestros hijos no es sencillo a día de hoy. De ello bien se encargan las empresas de publicidad, que hacen un gran trabajo para aumentar las ventas de productos nada recomendables. Comer de manera saludable es muy importante, y enseñárselo a nuestros hijos desde pequeños, para crear buenos hábitos, más. Así que aquí voy a darte algunas claves para intentar que las mochilas de nuestros hijos vayan cargadas de almuerzos saludables.
Lo primero que tienes que saber es ¿qué debes evitar?
1. Lácteos azucarados. Yogures líquidos, yogures de sabores o azucarados, batidos y cualquier tipo de lácteo que publicita maravillosas cualidades por sus bífidobacterias no son lo más adecuado para un buen almuerzo. Lo único que vas a conseguir es sobrepasar en mucho los límites diarios recomendados de azúcar. Por tanto, más riesgo de obesidad y caries, entre otros.2. Zumos, tanto industriales, procedentes de concentrado, néctares, con leche, como los naturales. Tres cuartos de lo mismo que con respecto al apartado anterior.
3. Bollería. Tanto la industrial como la casera llevan mucho azúcar, de más. Súmale a la bollería industrial la gran cantidad de grasas no saludables que llevan. Simplemente mejor no lo cojas del lineal del supermercado.
4. Embutido. Sí, lo sé. Igual aquí se te cae un mito, pero el bocadillo de salchichón de toda la vida no es saludable para todos los días. Los embutidos y la carne procesada no son buenos para un consumo habitual. ¿Quieres tomarlos de vez en cuando? De acuerdo, pero que no sean la norma. Incluso el jamón de york o los embutidos más magros se ha visto que tampoco son tan buenos como parecían.
¿Quiere decir todo esto que de lo que te indico arriba debes huir como de la peste? Pues mujer, no hay que ser extremista en esta vida. Cada uno decide libremente, pero ya ves que no son buenas elecciones. Yo no lo elegiría.
¿Qué buenas alternativas tenemos? La verdad es que tenemos muchas, y no tienen porqué ser nada complicadas. Sólo hace falta cambiar el chip.
1. Si a tu hijo le gusta la leche o el yogur, también pueden ser una opción. Pero naturales, “blancos” de toda la vida. Sin azúcares añadidos de ningún tipo. Para beber, agua.
2. Fruta. La fruta siempre es una buena alternativa. Fruta de temporada, como quieras o más les guste a los pequeños de la casa, entera o partidita en trozos. Tienes muchas frutas fácilmente transportables, seguro que hay muchas con las que triunfar.
3. Frutos secos. Los frutos secos crudos son una fuente inmejorable de fibra, grasas saludables y con múltiples vitaminas y minerales. ¿Qué más se les puede pedir? Pues que no se los mandes si tu hijo aún va a infantil, porque hay riesgo de atragantamiento . Hasta los 4-5 años frutos secos en trocitos nada de nada, por favor. Para los más mayorcitos son una opción maravillosa.
4. Bocadillo. ¿Sin embutido? ¿Entonces, qué le ponemos? Le puedes poner queso, si es menos graso mejor que mejor. Las conservas de pescado o el salmón marinado también son una buena opción de bocata y además están tomando pescado. ¿Has probado los patés vegetales (tipo hummus o sobrasada vegana)? Están buenísimos, igual te sorprendes y les encanta. ¿Qué tal un bocadillo de tortilla? Igual le tienes que dedicar cinco minutos más al bocata, pero ya ves que el mundo no acaba en la mortadela.
Hay colegios con su día de la fruta, coles con ruedas de distintos almuerzos. Con todas estas opciones puedes cuadrar la media mañana de toda la semana de una manera saludable. Sólo hay que ponerle un poco de voluntad. Y tú, ¿qué has pensado para meter mañana en su mochila?
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