Cómo conseguir que la casa no huela a pescado cuando cocinamos

Un básico de la dieta mediterránea es el pescado, un alimento rico en nutrientes y bajo en calorías que despierta nuestro apetito. Ya sea a la plancha, al horno o estofado, da igual la forma de preparación, este delicioso manjar no puede faltar en el menú semanal de cualquier hogar que lleve una alimentación equilibrada y saludable.

Sin embargo, a pesar de su delicioso sabor, a veces su olor puede resultar desagradable, ya que al cocinarlo puede impregnar la casa con su aroma durante un buen rato. Incluso si cuentas con la campana extractora más potente del mundo, el olor a pescado puede persistir durante horas si no se toman ciertas precauciones que te detallaremos en este artículo.

Ventilación adecuada

Antes de empezar a cocinar, asegúrate de abrir las ventanas y puertas para crear una corriente de aire en toda tu casa. Esto ayudará a eliminar los olores al permitir que el aire circule y se lleve consigo los olores del pescado.

Si tienes la suerte de vivir en un domicilio muy grande o de varias plantas, tan solo hará falta que abras las puertas y ventanas de las estancias colindantes. Pero si tu hogar es pequeño, abre todo lo que dé al exterior lo que puedas, excepto los dormitorios, estas estancias, mejor cerradas para evitar dormir con olor a merluza.

A esta medida, súmale el uso de la campana extractora, es primordial para evitar que los humos de tu cocinado invadan la casa e impregnen los muebles. Consejo: déjala funcionando un rato una vez termines de cocinar para que absorba los olores y los humos que pueden quedar en la cocina.

El truco del vinagre blanco

Algunos tipos de pescado, como la sardina, tienen un olor muy fuerte, por lo que te recomendamos que si vas a cocinarlos, prepares un cuenco con vinagre blanco antes. Debes tenerlo cerca de la zona de cocción durante todo el cocinado y verás que absorberá parte de los olores y ayudará a neutralizarlos.

A este mismo bol le puedes añadir luego unas gotas de limón exprimido y utilízalo para limpiar las superficies de la cocina. Así te asegurarás de que no quede olor alguno.

Ambientadores naturales

Otro truco muy útil para acabar de forma rápida y eficaz con el olor a pescado que queda en la cocina y el resto de nuestro hogar, es poner a hervir agua con cáscaras de naranja y limón una vez has terminado de cocinar. Déjalo a fuego lento durante 20 minutos y verás como los malos olores desaparecen gracias a los vapores cítricos. Actuará como un ambientador natural para tu casa.

En el caso de que hayas hecho el pescado al horno, no lo apagues tras el cocinado y colócale dentro unas ramas de canela durante 5 minutos. Luego apágalo y deja la puerta abierta y el delicioso aroma dulce de la canela invadirá tu hogar.

Recetas con truco

Al cocinar el pescado, puedes probar con recetas que incluyan limón y especias aromáticas como el perejil, el eneldo o el tomillo. Estos ingredientes no solo mejorarán el sabor del pescado, sino que también contribuirán a enmascarar su olor característico.

Otra opción es cocinar el pescado al horno envuelto en papel de aluminio, lo que se conoce como papillote. No solo conseguirás que tu electrodoméstico quede libre de olores, sino que también tendrás un plato muy gustoso, ligero y que mantendrá todos sus nutrientes.

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