Receta de patatas hojaldradas bravas: Crujientes y deliciosas

Las patatas bravas son un clásico de la cocina española. Pero ¿alguna vez has probado las patatas hojaldradas bravas? Esta deliciosa variante es una excelente manera de agregar un toque original y novedoso a un plato que no puede faltar en cualquier 'tapeo'.

Este plato es una maravillosa opción para una cena informal o para una reunión de amigos, pues es fácil de hacer, está delicioso y llena. Además, se puede presentar de varias formas y permite experimentar con diferentes salsas, aparte de la brava, para darle un toque personalizado a tu receta según requiera la ocasión. Prueba con un toque de salsa alioli para un sabor más suave o con una salsa picante de chile para una velada más atrevida.

Ingredientes

Para las patatas

• 4 patatas grandes
• Aceite de oliva
• Sal y pimienta negra molida al gusto

Para la salsa brava

• 1 cebolla grande
• 3 dientes de ajo
• 400 gramos de tomate natural triturado
• Un vaso de caldo de verduras
• 1 cucharada de pimentón picante
• 1 pizca de pimienta de cayena sin semillas
• 1 cucharada de azúcar (opcional)
• 1 cucharada de vinagre de Jerez
• Sal y pimienta al gusto
• Aceite de oliva virgen extra

Paso a paso

Patatas hojaldradas

1. Precalienta el horno a 160 °C.

2. Lava bien las patatas y córtalas en rodajas muy finas con la ayuda de una mandolina. Coloca las rodajas en una placa de horno con un poco de aceite de oliva, asegurándote de que cada rodaja esté cubierta de aceite. Agrega una pizca de sal y pimienta negra molida por capa.

3. Continúa agregando capas de patatas y sazonando con sal y pimienta hasta que tengas una pila de patatas de al menos 1,5 cm de grosor.

4. Coloca otra bandeja encima de las patatas y una pieza de metal pesada para que ejerzan presión. Hornea durante una hora a 160 °C, hasta que las patatas estén suaves.

5. Una vez que las patatas estén cocinadas, quita la bandeja superior y la pieza de metal y hornea a 180 °C durante 10 o 15 minutos, hasta que las patatas presenten un aspecto dorado y parezcan ya un poco crujientes.

6. Deja que las patatas se enfríen completamente. Luego, calienta una sartén con abundante aceite de oliva y fríe los bastones de patata hasta que estén dorados y crujientes.

7. Escurre los bastones de patata en papel de cocina absorbente y agrega una pizca adicional de sal y pimienta negra molida al gusto.

Salsa brava

1. Pela y pica la cebolla y los dientes de ajo en trozos pequeños, a no ser que los hayas comprado ya picada.

2. En una sartén con un poco de aceite de oliva, pocha la cebolla y el ajo a fuego suave durante unos 10 minutos, aproximadamente. Si ves que se empiezan a quemar, añade un poco de agua muy caliente.

3. Añade el pimentón picante y la pimienta de cayena y remueve hasta que mezcle bien. Luego rehoga la mezcla unos segundos para integrar los sabores.

4. Agrega el tomate natural triturado, el caldo de verduras, el azúcar, el vinagre de Jerez y la sal y pimienta al gusto.

5. Deja que todos los ingredientes se cocinen durante media hora, a aproximadamente, a fuego medio.

6. Cuando la salsa esté lo suficientemente espesa, triturar y pásala por un colador para quitar los tropezones.

7. Deja enfriar y guárdala en la nevera, dentro de un recipiente hermético. También la puedes congelar si vas a querer conservarla durante más de una semana.

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